El clima de septiembre sigue sorprendiendo. Mientras las mañanas han arrancado frescas en gran parte del país, todo apunta a un giro radical en las próximas horas. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha tomado la delantera y ha confirmado lo que muchos intuían: llega el veranillo de San Miguel. Y lo hace antes de lo previsto.
En los últimos días, algunos meteorólogos aficionados ya venían hablando del posible regreso del calor. Entre ellos, Jorge Rey, conocido por sus métodos alternativos y sus predicciones virales. Sin embargo, la AEMET ha querido posicionarse con claridad. Ha ofrecido datos concretos y fechas que despejan cualquier duda.

Todo indica que el cambio se sentirá desde este mismo jueves. A partir de ahí, las temperaturas subirán de forma notable en casi toda la Península. Las máximas crecerán entre cinco y diez grados en menos de 48 horas. En el sur y el interior del país se esperan valores por encima de los 30 grados.
Las mínimas también subirán, aunque de forma más moderada. El contraste térmico entre el día y la noche será menos acusado. El calor no solo afectará a zonas cálidas. También se notará en el norte, aunque de forma más contenida.
Un veranillo de San Miguel que pasará rápido
El veranillo, como es habitual, tendrá una duración limitada. La previsión apunta a que el episodio cálido se prolongará hasta el fin de semana. A partir del domingo por la noche, un frente atlántico podría modificar de nuevo el escenario. El regreso del aire frío marcaría el final del episodio, devolviendo la atmósfera a condiciones más propias del otoño.

No todas las regiones vivirán el veranillo con la misma intensidad. Las áreas del sur peninsular y el Levante serán las más afectadas por la subida de temperaturas. En cambio, en zonas del norte y del Cantábrico el fenómeno será más suave. Incluso podría coincidir con cielos nubosos o lloviznas.
El ambiente seco y estable dominará durante el día. Habrá muchas horas de sol, especialmente en el centro y sur del país. Sin embargo, en puntos costeros y áreas montañosas podrían formarse nieblas o nubes bajas al amanecer.
Aunque este fenómeno es habitual en estas fechas, su intensidad puede variar cada año. En esta ocasión, el cambio térmico será más marcado. Se pasará de días otoñales a jornadas plenamente veraniegas. Algunos termómetros podrían marcar temperaturas similares a las de agosto.
Con este aviso, la AEMET deja atrás las conjeturas y sitúa el debate en parámetros técnicos. El organismo oficial refuerza así su papel como fuente principal de información meteorológica. Lo hace con datos contrastados, dejando en segundo plano las predicciones más informales.
Quienes tengan planes al aire libre durante el fin de semana deberán tenerlo en cuenta. La estabilidad y el calor serán la tónica general. Pero también conviene recordar que el veranillo será breve. El regreso del otoño podría estar más cerca de lo que parece.

