Hecho surrealista en un avión de la aerolínea Delta que se dirigía a Barcelona. Tal como hemos podido conocer a través de Twitter, el pasado 1 de septiembre, un avión de la compañía Delta que hacía un vuelo entre las ciudades de Atlanta y Barcelona, tuvo que dar marcha atrás.
¿El motivo? Pues un hecho totalmente surrealista y hasta podríamos afirmar que sin precedentes. Según hemos podido saber, el avión tuvo que volver por la diarrea de un pasajero. Los hechos tuvieron lugar en una aeronave modelo Aribus A350-900.
El avión tuvo que volver después de una hora de vuelo
Todo sucedía con normalidad hasta que después de una hora de vuelo, las cosas se torcieron. El piloto del avión se vio obligado a dar marcha atrás, ya que un pasajero había hecho diarrea «por toda la cabina». De esta forma, el piloto catalogó la desagradable situación de «alarma biológica».
«Un Airbus A350 de Delta Airlines regresó a Atlanta el viernes por la noche debido a la diarrea de un pasajero en todo el avión y esto es un riesgo biológico. También un pasajero preguntó a través de Twitter por qué el vuelo de su hijo estaba dando vuelta».
El avión llegó a Barcelona con 8 horas de retraso
A las 22:39 horas el avión aterrizó en el aeropuerto de Atlanta y después de horas de limpieza a raíz de las defecaciones del pasajero, el vuelo volvió a despegar a las 03:00 horas de la madrugada. Finalmente, ocho horas más tarde de lo previsto, los pasajeros llegaron a su destino, Barcelona.
Atrapados en el aeropuerto de Los Ángeles
El pasado 28 de agosto, una incidencia en la compañía aérea Level dejó atrapados en el aeropuerto de Los Ángeles alrededor de 280 viajeros que debían volar hacia Barcelona. Los pasajeros, muchos de ellos catalanes, debían volar desde el aeropuerto internacional hasta Cataluña el pasado 26 de agosto.
Pero la compañía aplazó el vuelo por «motivos técnicos» hasta el 27. El domingo, sin embargo, el vuelo tampoco despegó. «Es un caos de información», criticó Agustí Mas, uno de los afectados en Los Ángeles, en declaraciones al ACN.
Por su parte, la aerolínea del grupo IAG defendió que trabajó para recolocar a todos los pasajeros, pero aseguró que la alta ocupación de los vuelos y el temporal de aquel fin de semana supusieron una «complicación añadida».
A primera hora de la tarde del martes 29 de agosto, algunos pasajeros explicaron que la aerolínea les había recolocado en aviones con destino a Londres. Sin embargo, en algunos casos, también se encontraron con problemas en el aeropuerto británico.