El Barça llega al primer partido tras el parón internacional con dos bajas de enorme peso. Gavi está descartado por molestias en su rodilla derecha y no se espera su vuelta inmediata. Frenkie de Jong también arrastra molestias, lo que complica aún más la planificación de Hansi Flick.
Estas dos ausencias golpean la estructura del equipo en una zona clave del campo. La falta de Gavi deja el centro del campo sin su energía, mientras que la baja de Frenkie de Jong es clave para dar estabilidad a la medular. El técnico alemán debe ajustar su plan con recursos limitados.
Solo una alternativa clara como pivote
La única solución que contempla Hansi Flick es apostar por Marc Casadó como pivote titular. El canterano ha mostrado su valía en momentos puntuales, pero no había logrado consolidarse en un rol protagonista. Con este doble KO, el escenario le brinda una oportunidad decisiva para dar un paso adelante.
Flick tiene claro que, pese a su juventud, Marc Casadó reúne las características necesarias para cubrir la posición con equilibrio e intensidad. La situación lo convierte en pieza central para recibir al Valencia, sin margen para demasiadas alternativas.
Marc Casadó volverá a ser titular
Sin De Jong, el Barça pierde control y equilibrio en el juegod el equipo. Sin Gavi, fuerza e intensidad en los momentos más decisivos. Es por eso que Flick deberá buscar soluciones tácticas que compensen ese déficit, y en este sentido todas las miradas apuntan hacia Marc Casadó.
En este contexto, la presencia de Casadó cobra un valor esencial. Su conocimiento del juego posicional y su capacidad de trabajo lo hacen idóneo para sostener la medular. El equipo necesitará que asuma responsabilidades con madurez para no resentirse ante el Valencia.
El movimiento de Flick implica riesgos. Marc Casadó no cuenta con la experiencia de otros compañeros, pero aporta frescura, disciplina táctica y un conocimiento profundo del modelo del Barça. Confiar en él demuestra que el entrenador cree en el valor de la cantera en momentos críticos.
El partido ante el Valencia puede marcar un antes y un después en su carrera. Si responde al desafío, ganará peso en la rotación de Hansi Flick y confianza para los próximos meses. Si no lo logra, quedará claro que el Barça debe seguir buscando alternativas en un centro del campo muy tocado por las lesiones.