La temporada 2025-26 del Barça comienza con una determinación firme por parte de Hansi Flick. El técnico alemán ha dejado claro que en su equipo no hay privilegios previos. Quién actúa de titular dependerá de la forma y no de nombres.
Jules Koundé, pieza habitual en la defensa la temporada pasada, ha visto cómo su estatus ha sido cuestionado. Hansi Flick ha apostado por otro nombre en el lateral derecho tras observar su rendimiento contundente. Esa decisión marca el inicio de una nueva etapa competitiva en la línea defensiva del Barça.
La decisión de Hansi Flick: Eric García por delante
Hansi Flick ha confiado en Eric García como lateral derecho titular desde el inicio del curso. Esa elección llegó tras una pretemporada en la que García demostró solidez y continuidad. Esta apuesta en el lateral ha relegado a Koundé directamente al banquillo.
Koundé sí tuvo minutos ante el Rayo Vallecano, pero su actuación fue errática. Se le atribuyeron varias desconexiones defensivas que ampliaron las dudas sobre su retorno al once. Hansi Flick dejó claro que “hasta nuevo aviso” no volverá a ser titular si no demuestra confianza y rendimiento.
Cómo condiciona Hansi Flick la titularidad en el Barça
Hansi Flick ha instalado una máxima clara: jerarquías pasadas no cuentan en sus decisiones. Solo el estado de forma y la actitud en los entrenamientos determinarán quién juega de inicio. Esa exigencia pone a Koundé en una situación tensa, obligándole a redoblar esfuerzos para recuperar la confianza del técnico.
Eric García, en cambio, ha tomado protagonismo en la plantilla del Barça. No solo por cubrir un rol en la defensa, sino por su versatilidad táctica y seguridad en cada partido. Hansi Flick lo valora como un pilar emergente que aporta confianza y claridad al sistema defensivo.
El futuro inmediato de Koundé en tensión
Con la suplencia de Jules Koundé, el margen de maniobra del francés se reduce al mínimo. Debe aprovechar cada oportunidad y dar una respuesta clara para volver al once titular del Barça. Hansi Flick ha sido tajante: la disciplina, el rendimiento y la confianza inmediata son la vía para recuperar la titularidad.
Esta situación también manda un mensaje interno al resto de la plantilla. Demuestra que ni siquiera pesos pesados como Koundé son intocables en el Barça. La competencia es real, el exigente control está vigente y el rendimiento manda.