Empieza la cuenta atrás para el estreno de la novena temporada de 'El Foraster' y Quim Masferrer ha aprovechado la oportunidad para explicar en una entrevista cómo ha impactado el programa en su vida.
El éxito de 'El Foraster'
El 18 de septiembre regresa uno de los programas más populares de TV3. En la última entrega de 'El Foraster', se consiguió una media de 508.000 espectadores y un 25,1% de cuota.
El último episodio se emitió en el noviembre de 2022 y ahora ya queda nada para que se estrene la novena temporada.
El próximo lunes 18 de septiembre, vuelve Quim Masferrer con sus visitas en los pequeños pueblos de Cataluña y los monólogos que presentará delante de sus habitantes.
El consejo que lo cambió todo
Aprovechando este contexto, Masferrer ha sido entrevistado en el programa 'Aquí Catalunya' de la SER Catalunya.
Durante la entrevista, el presentador ha destacado el enorme éxito de su programa y las inquietudes que tenía su equipo antes de empezarlo.
«Una de las preocupaciones que teníamos cuando empezamos era cómo acercarnos a la gente de los pueblos». Ante esta duda, el presentador optó por hacer caso a un consejo de su padre:
«Antes de empezar el programa, mi padre que es campesino me dijo que sobre todo fuera con ganas de aprender y no de enseñar porque sino la gente te mandará a la porra y no te contará nada. Esta es mi intención desde el primer día», ha explicado.
Un nuevo Quim después de 'El Foraster'
Quim Masferrer también ha recordado que el programa tuvo su versión española en La 1, 'El paisano', con cinco temporadas y cinco presentadores distintos.
«Creo que el secreto del éxito es que su presentador cree que tiene el mejor trabajo del mundo. Cada vez que me voy a grabar soy como un niño pequeño que se va de colonias. Quiero conocer el lugar donde comeremos, que me presenten la gente del pueblo...», ha reconocido.
«El programa me ha cambiado la vida profesional y personalmente. A cada pueblo que visito, me voy con amigos y aprendo cosas», ha explicado.
También ha revelado que las gravaciones duran tres días en cada pueblo y que antes de iniciarlo, un equipo va a preparar el terreno. «El azar tiene un factor muy importante. Han salido grandes historias de la improvisación», ha recalcado.
«Puedes ir a todos lados y no solo a pueblos rurales»
«En el fondo te das cuenta de que las personas somos bastantes iguales a todos lados y nos preocupan las mismas cosas... Las personas hacen que un pueblo muy feo sea el pueblo más bonito del mundo», ha reflexionado con una gran sonrisa en la boca.