Ana Obregón fue titular de centenares de portadas después de anunciar que era mamá de una pequeña por gestación subrogada.
La hija-nieta de la actriz es el único recuerdo que tiene de su difunto hijo, Aless Lequio Obregón.
La exclusiva de la Obregón
Ana Obregón vendió en exclusiva para la revista ¡Hola! que había tenido una hija por gestación subrogada en Miami, acompañada de una imagen suya en silla de ruedas.
Ana Obregón reconoció que había «recuperado la alegría». Sin embargo, la prensa tuvo una opinión muy clara sobre el nascimiento de la pequeña.
Ana Obregón cumple el sueño de su hijo difunto
Hace casi seis meses que la pequeña Anita nació en Estados Unidos. La hija de Aless Lequio fue su tercer y último deseo antes de morir.
«No he tomado ninguna decisión a la ligera. Anita no es un capricho», asegura tajante. Está escrito por mi hijo y ante Notario: Es mi última voluntad ser padre aunque no esté, acordaos de la muestra que hay en Estados Unidos», explicó recientemente en Antena 3.
Ana Obregón la llevará con su padre
Ana Obregón cumplió los deseos de su hijo después de que muriera por cáncer en el 2020.
La muerte de Aless Lequio fue un golpe muy duro para la actriz y pasó una grave depresión. Aunque ahora Anita le ha devuelto la sonrisa y está más feliz que nunca.
«Todos los días, durante tres años, fui al cementerio, y ahora voy una vez a la semana. Le he llevado a mi hijo el primer chupete y biberón de Anita», explicó.
También desveló que aún no ha llevado a Anita a ver a su padre, pero tiene pensado hacerlo en un futuro no muy lejano:
«Aún no he ido con la niña. La llevaré cuando tenga dos años y le enseñaré dónde está el cuerpo de su papá, porque él está en el cielo, y le explicaré todo».
Un ángel de la guarda
Aless Lequio sigue muy presente en la vida de Ana Obregón. Es un duelo al que la actriz lleva enfrentándose los últimos tres años, pero ahora por primera vez ve la luz.
«Ahora lo recuerdo en paz, porque antes no podía. Es difícil, porque cuando abrazo a Anita huele como su padre. Se parece a él en su forma de ser. Tiene la misma alegría y esas ganas de vivir. Todo le emociona y es muy agradecida», explicó.
«Me sentía muy sola. Esta casa, en la que estamos ahora, se me caía encima. Cada rincón era Aless... Anita me ha salvado la vida», sentenció