Artur Mas está de enhorabuena. El que fue presidente de Cataluña y su mujer, Helena Rakosnik, serán abuelos otra vez. Así lo ha anunciado su hijo, Artur Mas, en Instagram.
El joven se casó este mismo verano con su pareja de hace tiempo, Griselda March. Y ahora acaban de anunciar que ambos esperan su primer hijo en común, que nacerá en los próximos meses.
Artur Mas y su mujer, padres por primera vez
Buenísima noticia para Artur Mas y Helena Rakosnik. Ambos han sabido este lunes que su hijo, también llamado Artur Mas, y su mujer Griselda March están esperando su primer bebé juntos.
La encargada de anunciarlo ha sido la misma Griselda, a través de Instagram. La pareja realizaba este lunes, 25 de septiembre, festivo en Barcelona, un viaje fugaz a París. La misma ciudad del amor que han usado para dar la buena noticia a todos sus seguidores.
«París con mis amores», escribía Griselda March acompañado las fotografías. Ya la primera, en blanco y negro, se la puede ver junto a su marido Artur Mas y con una notable barriga de embarazada.
Una fotografía que no ha pasado desapercibida para nadie. Pues han sido muchos los que no han dudado en comentar la imagen en las redes sociales. «Enhorabuena», comentaba un usuario. «Que seáis muy felices», decía otro seguidor de la joven. «Muchas felicidades, pareja».
El hijo que están esperando Artur Mas y Griselda March será el tercer nieto del expresidente de Cataluña. Artur Mas y Helena Rakosnik son abuelos de dos niñas, Gal·la y Helena, fruto de la relación de su hija mayor Patricia y su pareja Raul.
Artur Mas y Griselda, una boda de ensueño
Artur Mas y Griselda March se casaron este verano en una boda de ensueño. El pasado sábado, 1 de julio, la pareja se daba el 'sí, quiero' en una ceremonia especial.
El lugar escogido fue Menorca. Concretamente, en Fornells, en el norte de la isla. Y es que se trata de un sitio especial. Es donde cada año la familia Mas veraniega.
Y como no podía ser de otra forma, el enlace de Artur Mas y Griselda March tenía que realizarse allí. El postre, además, fue un claro homenaje al sitio escogido. Los invitados pudieron disfrutar de una ensaimada gigante para terminar el banquete.