Hay rostros que nunca desaparecen del imaginario televisivo catalán, aunque cambien de serie, de época o incluso de carácter. Uno de esos nombres que siempre regresan con fuerza es el de Oriol Vila.
Actor versátil, con una carrera tan extensa como discreta, Vila ha sabido mantenerse en el primer plano, convirtiéndose en uno de los pilares de la ficción en TV3. Ahora brilla con luz propia en Com si fos ahir, interpretando a Eugeni, un personaje ambiguo, poliamoroso y magnético.
Oriol Vila tiene una expareja aún más famosa que él
A sus 46 años, Oriol Vila tiene esa rara capacidad de parecer eternamente joven, lo que le ha permitido encarnar personajes de distintas generaciones. Formado en los escenarios y curtido en decenas de series y películas, su talento fue reconocido incluso por la Academia de Cine.
En este contexto, lo nominaron al Goya como actor revelación por su papel en Todas las canciones hablan de mí. Pero Vila es más que un rostro habitual: es una figura imprescindible para entender el mapa actoral catalán de las últimas décadas.
Lo que pocos saben —o pocos recuerdan— es que en su vida personal también hay una conexión profunda con el mundo del espectáculo catalán. Oriol Vila fue pareja de Rosa Boladeras, conocida por su trayectoria teatral y por su papel en Temps de silenci, entre muchos otros.
Así es el hijo de Oriol Vila y Rosa Boladeras
Hoy, Boladeras ha dado un paso más allá de la interpretación: es concejala de Prensa en el Ayuntamiento de Terrassa. Fruto de esa unión nació Tim Vila Boladeras, un joven que a sus 21 años ya ha comenzado a abrirse camino como actor.
Aunque ha estudiado producción musical, la pasión artística corre por sus venas. Ha debutado en la serie de TV3 Això no és Suècia, con un pequeño papel. Una interpretación que podría ser el inicio de una carrera tan prometedora como la de sus padres.
No cabe duda de que Oriol Vila sigue siendo uno de los actores más sólidos de la televisión catalana. El intérprete se ha ganado el respeto del público y de la profesión a base de talento y trabajo constante.
Lleva años demostrando que sabe adaptarse a cualquier papel, y en Com si fos ahir vuelve a destacar. Su trayectoria habla por sí sola, pero lo más interesante es que no ha terminado: sigue en activo, en forma y con ganas de más.