Amal Clooney, abogada de derechos humanos y esposa de George Clooney, se enfrenta a una complicada situación en Estados Unidos. El actual y controvertido presidente americano, Donald Trump, tiene en el punto de mira al matrimonio. La colaboración de Amal con la Corte Penal Internacional (CPI) en la investigación de crímenes de guerra en Gaza ha generado tensiones diplomáticas.
La administración de Donald Trump ha impuesto sanciones que podrían afectar a su residencia y su trabajo en el país. La mujer de Clooney de origen libanés, tiene la nacionalidad británica, pero dispone y reside en su propiedad en Estados Unidos. No obstante, desde la Casa Blanca se planea prohibirle la entrada en el país.

Amal Clooney, esposa de George Clooney, hace saltar las alarmas en Estados Unidos
Amal Clooney y George Clooney se encuentran en la lista de personas non gratas del actual presidente de Estados Unidos. Trump no ha pasado por alto el trabajo como abogada de Amal, quien lleva toda una vida luchando por los derechos humanos. Su último proyecto está destinado “a evaluar las pruebas de presuntos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad en Israel y Gaza”.
Un tema muy delicado para la administración Trump, quien no desea que ciertos asuntos con Israel salgan a la luz. Por ello, no ha tardado en reaccionar y amenazar a todos los abogados que trabajen con la Corte Penal Internacional, entre ellos Clooney. Desde la Casa Blanca ya planean sanciones entre las cuales se encuentra la prohibición de entrar en Estados Unidos.

Todo comenzó en 2024, cuando la pareja de George Clooney asesoró a la CPI en la evaluación de jurisdicción sobre delitos cometidos entre Israel y Hamás. Este asesoramiento contribuyó a la emisión de órdenes de arresto contra líderes israelíes, incluyendo al primer ministro Benjamín Netanyahu. Como respuesta, Trump ha firmado la Orden Ejecutiva 14203 en febrero de 2025, sancionando a funcionarios de la CPI y a sus colaboradores.
Estas sanciones incluyen restricciones de visado y congelación de activos para quienes participaron en la investigación de la CPI. Aunque Amal no fue nombrada directamente, su implicación la coloca en riesgo de ser afectada por estas medidas.
Amal Clooney y George Clooney podrían ser vetados en Estados Unidos
La situación es especialmente delicada para Clooney, quien reside en Estados Unidos con su esposo y sus hijos. La posibilidad de ser vetada del país representa una amenaza directa a su vida familiar y profesional. Además, plantea interrogantes sobre la libertad de los abogados para ejercer en casos internacionales sin represalias.
Las decisiones tomadas por la administración Trump han hecho saltar todas las alarmas. Organizaciones legales y de derechos humanos han expresado su preocupación por estas sanciones totalmente injustificadas.

La esposa de George Clooney ha sido muy crítica con las políticas de Donald Trump en diversas ocasiones. En discursos anteriores, ha condenado la retórica del Presidente contra la prensa y sus propuestas que, según ella, violan los derechos humanos internacionales. Su postura firme la ha convertido en una figura destacada en la defensa de las libertades civiles y en enemiga de Trump.
Pero no solo ella, George Clooney también ha sido el blanco de las críticas del marido de Melania Trump. El político calificó a George de “estrella de cine de segunda” y de “experto político fracasado”. Existe, por tanto, una guerra declarada entre la Casa Blanca y el matrimonio Clooney que no está dispuesto a dejarse amedrentar.
Amal cuenta con el apoyo de la Asociación Americana de Abogados, que calificó las medidas como un ataque a la independencia judicial. Expertos legales señalan que estas acciones carecen de precedentes y podrían violar principios fundamentales del derecho internacional. Defienden que no cederán ante intentos de transformar la abogacía en una profesión que recompensa a quienes apoyan al Gobierno “y castiga a quienes no”.