La nueva edición de Gran Hermano VIP está a punto de comenzar y los responsables del programa han conseguido algo realmente complicado. Hasta la fecha no hay ningún concursante confirmado, excepto la reportera Sol Macaluso y es ahí donde entra en juego Gustavo. El chófer de María Teresa Campos cerró un suculento contrato para participar en el formato, pero ahora ha dado un paso atrás.
María Teresa Campos considera a Gustavo Guillermo un hijo más, de hecho está incluido en su testamento y participará en su herencia. Sin embargo, le diario 20 Minutos le acusa de no haber jugado limpio, pues supuestamente pensó en hablar de la familia Campos a cambio de dinero. No es la primera vez que se rumorea algo parecido, de hecho él mismo reconoció haber grabado a Carmen Borrego.
María Teresa le consideraba un hijo más, por eso Terelu Campos siguió contando con sus servicios. No obstante, estaba muy disgustada con él y la relación nunca volvió a ser la misma. Esa es la razón por la que Gustavo aceptó la propuesta de Gran Hermano VIP.
María Teresa se hubiera quedado de piedra, pero estuvo al margen de esta determinación. Su conductor no le dijo que estaba coqueteando con Telecinco para convertirse en la nueva estrella de la cadena.
La última hora sobre Gustavo y GH VIP
La periodista Gema López ha explicado que determinación ha tomado Gustavo después de los últimos acontecimientos. A pesar de que tenía pensado convertirse en la estrella de Gran Hermano VIP, ha cambiado de opinión. Considera que lo sucedido con María Teresa Campos es motivo suficiente para dar marcha atrás y ha paralizado su participación.
Horas antes de empezar GH VIP, el formato ha perdido a uno de sus grandes protagonistas. La familia de María Teresa está realmente sorprendida, pues siempre pensó que Gustavo sería fiel. También es cierto que nadie ha podido demostrar que haya hablado mal de Campos en ningún momento, de hecho se dice todo lo contrario.
María Teresa pasó con él sus últimos años y contó con sus servicios durante más de tres décadas. Cuando se mudó al piso de Madrid, un inmueble por el que pagaba 2.000 euros mensuales, era Gustavo el que pasaba gran parte del día con ella. Paseaban juntos en el coche para evitar a los paparazzi.