En plena era digital, los gestos en redes sociales pueden decir mucho más que las palabras. Uno de esos gestos sutiles, pero elocuentes, se encuentra en el perfil oficial de Instagram de la Casa Real noruega, liderada por el príncipe Haakon. El futuro soberano noruego acaba de generar un conflicto internacional por un detalle con el rey Felipe que traspasa fronteras.
Las relaciones entre ambas instituciones siempre han sido correctas y diplomáticas, por ello la decisión del príncipe Haakon llama la atención. El marido de Mette-Marit se desliga de otras casas reales europeas y marca su propia senda en la era digital.

El príncipe Haakon y su inesperado gesto con el rey Felipe
Las casas reales europeas se han lanzado al universo digital para acercar sus monarquías a la ciudadanía. Poco a poco han abierto sus perfiles oficiales sumando seguidores y sirviendo de baremo para fortalecer lazos. En el caso del rey Felipe, este ha visto cómo el príncipe Haakon de Noruega ha tenido un gesto inesperado con la monarquía española.
En Noruega se han plantado contra el Felipe y su familia descartando seguir en Instagram a la Casa Real española. Este detalle ha despertado la atención de algunos observadores de la realeza europea. En especial, porque las casas reales suelen mantener vínculos de cercanía, cooperación e imagen común.
A través de sus redes, suelen felicitarse mutuamente en ocasiones especiales, mostrarse juntos en visitas oficiales o, simplemente, seguirse como símbolo de cordialidad institucional. Sin embargo, la ausencia del rey Felipe en el radar de Instagram del príncipe Haakon no pasa desapercibida.
El rey Felipe sí sigue a la familia real noruega. Desde la cuenta oficial de la Casa Real se puede ver que siguen a la @detnorskekongehus, que es el perfil oficial de la monarquía noruega. Ese seguimiento no ha sido correspondido y, a día de hoy, la Casa del príncipe Haakon no sigue a los Borbones.
Este gesto ha llamado la atención, especialmente, entre quienes analizan los gestos simbólicos entre las casas reales europeas. No es que Instagram defina la diplomacia monárquica, pero sí refleja, en parte, cómo se cuidan ciertos detalles de la imagen pública. Y en este caso, el mensaje que transmite Noruega parece claro: Zarzuela no está en su lista de prioridades digitales.
El príncipe Haakon sigue su propia política con el rey Felipe
Lo más llamativo es que otras casas reales sí están en la lista de seguidos por la familia real noruega. Allí aparecen, por ejemplo, la monarquía británica y la casa real danesa, con quienes tienen vínculos históricos y personales muy estrechos. Pero ni rastro del rey Felipe.
La gran pregunta que surge es: ¿a qué se debe esta ausencia?, las posibles explicaciones son variadas. Por un lado, podría tratarse simplemente de una decisión estratégica, que no implica necesariamente una falta de cordialidad entre ambas casas reales. Y por otro, que el príncipe Haakon mantiene una política más selectiva en cuanto a las cuentas que sigue en redes sociales.

También existe la posibilidad de que se trate de un error u omisión. El rey Felipe autorizó la apertura de la cuenta oficial de la Casa Real española en junio de 2024. Por lo que es posible que simplemente se haya pasado por alto debido al ajetreo que conlleva una institución pública.
Cabe recordar que el príncipe Haakon y el rey Felipe comparten generación, responsabilidades y contexto. Ambos son figuras modernas dentro de monarquías que han debido adaptarse a los nuevos tiempos. Sin embargo, en lo que respecta a interacción en redes, parece haber una notable distancia.
En el mundo de la comunicación institucional, cada gesto tiene peso. No seguir a un homólogo no es, necesariamente, una afrenta, pero sí una señal. Y que el príncipe Haakon no siga al rey Felipe en Instagram da pie a todo tipo de interpretaciones.