El viaje oficial de Emmanuel Macron a Vietnam ha quedado eclipsado por un escándalo inesperado. A su llegada al país asiático, las cámaras captaron una escena que generó un gran revuelo. Brigitte Macron, la primera dama, pareció abofetear a su marido justo después de bajar del avión presidencial.
Las imágenes, grabadas por una agencia estadounidense, no tardaron en hacerse virales en las redes sociales. Emmanuel Macron, al darse cuenta de que había cámaras, intentó disimular el momento con una sonrisa forzada. Su esposa, vestida con un llamativo traje rojo, se mantuvo a su lado sin mostrar emoción alguna.

Desde el entorno del presidente no se ofreció una versión clara de los hechos en un primer momento. Algunos portavoces afirmaron que el vídeo estaba manipulado y que se trataba de un montaje. Sin embargo, la agencia que lo grabó confirmó rápidamente su autenticidad.
Esa confirmación obligó al Elíseo a cambiar su postura pública sobre el incidente. La nueva explicación aseguraba que todo fue una discusión sin importancia entre la pareja. Según ellos, un momento privado que accidentalmente quedó expuesto ante las cámaras.
Emmanuel Macron confiesa la verdad
Poco después, se dio un nuevo giro en el relato oficial de lo ocurrido. Esta vez se aseguró que había sido una simple broma entre el presidente y su esposa. Una muestra de complicidad justo antes de empezar su agenda oficial en Vietnam.
“Fue un momento de relajación”, afirmaron desde el entorno presidencial al medio AFP. Insistieron en que la escena no debía tomarse en serio ni interpretarse fuera de contexto. Aun así, la reacción de Macron en las imágenes ha hecho dudar a muchos.

La expresión del presidente tras el gesto de su esposa no parecía encajar con una situación de humor. Intentó mantener la compostura, pero su rostro denotaba sorpresa y tensión. Esa contradicción ha alimentado aún más las especulaciones.
Finalmente, Emmanuel Macron ha decidido hablar públicamente sobre el asunto. En una breve comparecencia, admitió que las imágenes eran reales y que sí hubo una pequeña discusión. Sin embargo, quiso dejar claro que no fue un conflicto grave ni preocupante.
Brigitte Macron guarda silencio
“Fue un malentendido entre dos personas que se quieren”, declaró el presidente ante varios periodistas. Aseguró que la escena no refleja la realidad de su relación con Brigitte. También afirmó que están acostumbrados a la presión de la vida pública.

No es la primera vez que surgen rumores de tensiones entre ellos, aunque nunca habían sido tan evidentes. En otras ocasiones se ha hablado de desencuentros, pero siempre han aparecido sonrientes en público. Esta vez, la contundencia del vídeo ha marcado una gran diferencia.
El silencio de Brigitte Macron desde que ocurrió el incidente ha sido interpretado de diversas maneras. Para algunos, es una estrategia para no avivar más la polémica. Para otros, refleja un posible malestar que aún no se ha resuelto.
Lo cierto es que el vídeo ha tenido un impacto mayor del que el Elíseo imaginaba. La sucesión de versiones distintas solo ha aumentado la confusión y el interés mediático. Muchos consideran que la gestión del escándalo ha sido torpe e improvisada.
A pesar de las explicaciones, el episodio ha dejado huella en la imagen pública del presidente francés. El momento privado, convertido en fenómeno global, ha expuesto un lado desconocido de la pareja presidencial. Y aunque Macron haya querido zanjar el tema, la controversia está lejos de apagarse.