El joyero de la reina Mary es un testimonio vivo de la historia y la herencia de la monarquía danesa. Cada pieza que posee cuenta una narrativa única, entrelazando siglos de tradición y momentos personales significativos. Como ha confirmado la Familia Real danesa, las joyas de Mary son heredadas de la reina Margarita, pero hay una que no se ha puesto.
Muchas piezas han sido transmitidas a través de generaciones de la realeza danesa, acumulando una historia fascinante. Algunas joyas tienen un origen que se remonta a siglos atrás, mientras que otras son piezas más contemporáneas. Aunque la actual reina posee piezas personales, la gran mayoría han sido heredadas de su suegra.

Sale a la luz la verdad de las joyas de la reina Mary
La reina Mary suele ser ejemplo de sencillez y discreción en los actos institucionales a los que acude. No obstante, cuando la ocasión lo merece, la mujer del rey Federico se engalana con sus mejores estilismos y joyas. Un ejemplo se encuentra en la conmemoración del 80 aniversario de la libertad de Dinamarca, donde lució un broche muy especial.
Ahora, la Familia Real danesa ha dado una noticia relacionada con las joyas de la reina Mary: la mayoría son heredadas, pero falta una. La colección de joyas de Mary de Dinamarca es rica en historia y tradición, y contiene piezas de diferentes épocas. Se pueden encontrar joyas del siglo XVIII, XIX y XX, cuya diversidad histórica enriquece la colección y su significado.
Una de las joyas más emblemáticas es la tiara de turquesas, diamantes y perlas, que supuestamente perteneció a la soberana rusa Catalina la Grande. Esta joya fue heredada por la reina Margarita y es la que todavía no se ha visto llevar a Mary. Se supone que forma parte de la colección de la reina, pero lo cierto es que posee un gran significado para la madre de Federico.
La tiara en cuestión está confeccionada con formas de margarita, haciendo honor al nombre de la antigua regente de Dinamarca. Esta la heredó de su madre, Ingrid de Suecia, quien la ha preservado de generación en generación. La madre del rey Federico tan solo la ha prestado en ocasiones especiales, como a su sobrina para la celebración del Jubileo de Rubí.
No obstante, a la reina Mary todavía no se la ha visto lucir tan significativa pieza, aunque se presume que está en su joyero real. El motivo podría deberse a que se trata de una pieza de gran calado personal para la reina Margarita y no tanto institucional. Por lo que podría reservarla para celebraciones más íntimas y no tanto relacionadas con la institución.
La reina Mary consolida su reinado gracias a la tradición
El joyero de la reina Mary no solo es una colección de valiosas joyas. También es un reflejo de la rica historia y las tradiciones de la monarquía danesa. Cada pieza cuenta una historia, conectando el pasado con el presente y simbolizando la continuidad de la realeza.

A través de estas joyas, Mary honra el legado de sus predecesoras y fortalece su papel como reina. Algo de suma importancia para su reinado, más aún tras las numerosas críticas que ella y su esposo, el rey Federico, llevan soportando meses.
La reina Mary es conocida por su buen gusto y su estilo, y utiliza sus joyas de manera impecable. Reconoce la importancia de cada pieza en cada acto y trata de que su uso sea una fuente de orgullo nacional. Porque cada joya representa un momento histórico en la vida de Dinamarca y es Mary quien se encarga de mantener viva la historia.