En una época en la que los móviles parecen una extensión del cuerpo, George y AmalClooney han tomado una decisión clara. Una medida que busca proteger la privacidad de sus hijos, Ella y Alexander, y crear momentos familiares alejados del escrutinio público.
Confiscan temporalmente los teléfonos de quienes visitan su hogar, así lo contó Amal, que utiliza una canasta especial para guardar los móviles durante las visitas. Considera que hoy en día mantener espacios privados es cada vez más complicado. Por eso, prefieren pasar tiempo juntos en casa, lejos de cámaras y atención.

Tanto ella como George, conscientes de su fama, han adoptado medidas para asegurar que sus mellizos tengan una infancia tranquila. El objetivo es que sus hijos crezcan alejados del foco mediático y la presión pública.
La verdad sobre Ella y Alexander que sorprende a muchos
Desde que nacieron en 2017, George y Amal han protegido con especial cuidado la identidad y vida privada de sus mellizos. A pesar de la fama mundial de George, han logrado que sus hijos crezcan en un entorno familiar estable y protegido.
Su vida se reparte entre residencias en Reino Unido, Italia y Francia. En 2021 se mudaron al sur de Francia, a una gran propiedad rodeada de naturaleza. Este espacio permite que los niños disfruten del aire libre, alejados del ruido y las cámaras.
Esta forma de vivir ha permitido que Ella y Alexander lleven una infancia feliz y normal. La discreción y protección familiar llenan de orgullo al entorno cercano de los Clooney.

Un día a día donde cuidado y diversión van de la mano
Amal prefiere estar involucrada personalmente en la crianza y no cuentan con una niñera a tiempo completo. Durante la pandemia, George asumió tareas domésticas, cuidando a sus hijos con dedicación y humor.
Para educar a los niños, George utiliza métodos originales. Por ejemplo, cuando se portan mal, reciben una “llamada de Santa Claus”, interpretada por un amigo cercano. Esto mantiene el ambiente familiar divertido y unido.
La combinación de protección, atención y juego hace que la vida de los Clooney sea un equilibrio perfecto. A pesar de la fama, consiguen que sus hijos disfruten de un entorno cálido y seguro.
El equilibrio entre fama y normalidad, el mayor logro de los Clooney
Amal y George nunca han mostrado imágenes de sus hijos en público ni en redes sociales. Para ellos, preservar la privacidad es una prioridad absoluta que se mantiene firme frente a las presiones externas. Quieren que Ella y Alexander crezcan sin la constante vigilancia ni el juicio que conlleva la fama.
Este compromiso con la intimidad familiar no solo protege a sus hijos, sino que también les permite desarrollar una vida más cercana a la normalidad. Ambos consideran fundamental que los mellizos experimenten la infancia sin la presión mediática que suelen sufrir los hijos de celebridades.
Con esta postura, los Clooney envían un mensaje claro sobre la importancia de proteger la infancia y la privacidad en un mundo tan expuesto. Su ejemplo inspira a muchas otras familias que buscan equilibrar la fama con la tranquilidad y el bienestar de los suyos.