Bill Gates siempre suele mostrarse comedido en sus declaraciones, aunque esta vez sorprendió con una reflexión íntima sobre su pasado sentimental. El fundador de Microsoft, de 69 años, ha roto su habitual silencio para compartir una confesión inesperada que ha dejado sin palabras a muchos seguidores. Su testimonio revela un anhelo profundo y muy humano: el deseo de haber construido un matrimonio duradero con su exmujer, Melinda.
"Quería un matrimonio de 45 años como el de mis padres", reconoció Gates en una entrevista concedida a The Times. La emoción contenida en sus palabras deja entrever el peso que todavía arrastra desde su divorcio. Pero, ¿por qué ahora, años después, decide abrir su corazón de este modo?
Bill Gates hace una inesperada confesión sobre su divorcio con su exmujer, Melinda Gates
Bill y Melinda se conocieron en 1987 y se casaron en 1994, en plena expansión del imperio tecnológico de Gates. Ambos construyeron una familia numerosa con tres hijos, Jennifer, Rory y Phoebe. Además, hoy comparten también la dicha de ser abuelos de dos pequeñas, Leila y Mia.
En 2021, Bill Gates y Melinda French pusieron fin a su matrimonio tras casi tres décadas de vida en común. Desde entonces, ambos han llevado caminos separados, aunque sin perder el contacto del todo por el bien de su familia. El multimillonario aclaró que esa decisión fue uno de los momentos más duros de su vida: "Es de lo que más me arrepiento", confesó.
A pesar de los altibajos, Gates asegura que vivieron una relación intensa y llena de momentos positivos. "Lo pasamos muy bien", recordó con una sonrisa melancólica. Aunque ambos eran personas muy determinadas, con agendas exigentes y visiones claras sobre sus objetivos, intentaron compaginar su vida profesional con la familiar de la mejor manera posible.
En sus declaraciones, Gates dejó clara la admiración que siempre sintió por su exmujer. Y es que estuvo con él desde el primer momento desde antes de fundar Microsoft, y el duro proceso que le costó mantenerlo. "Ella me acompañó en todas las etapas", expresó con gratitud.
Gates incluso apuntó que se implicó activamente en la crianza de sus hijos: "Pasaba más tiempo en casa con los niños que mi padre, en una proporción de diez a uno". Sin embargo, también reconoció que Melinda asumió gran parte de la responsabilidad en la educación y el cuidado de los pequeños. "Era Melinda quien se ocupaba de ellos en su mayor parte", aclaró.
Bill Gates reconoce que la separación fue devastadora para ambos
"Cuando nos divorciamos fue duro", confesó sin rodeos. No solo por la ruptura sentimental, sino por el impacto emocional que supuso para toda la familia. "El divorcio nos devastó durante al menos dos años", declaró el magnate, dejando al descubierto una herida que, aunque cicatrizada en parte, sigue presente.
Durante 27 años compartieron no solo una vida familiar, sino también un proyecto filantrópico conjunto. Bill & Melinda Gates Foundation es una de las organizaciones benéficas más influyentes del mundo. Sin embargo, la armonía profesional no fue suficiente para mantener vivo el matrimonio.
De hecho, Bill Gates admitió lo doloroso que resultó el momento en el que ella decidió desvincularse del proyecto común. "Yo estaba muy enfadado por su decisión de marcharse", añadió, aludiendo a la Fundación que ambos fundaron en el año 2000.
Sus palabras no dejan lugar a dudas: su mayor deseo era haber vivido un matrimonio largo, estable y duradero como el que tuvieron sus progenitores. "Quería un matrimonio de 45 años como el de mis padres", repitió con emoción contenida.
Más allá del éxito, la riqueza o la notoriedad pública, Gates pone el foco en las relaciones humanas, los afectos, y lo que pudo ser y no fue. Su reflexión no es solo un ajuste de cuentas con el pasado, sino también una invitación a mirar el futuro con mayor sensibilidad.
Actualmente, Bill Gates mantiene una relación con Paula Hurd, viuda del empresario tecnológico Mark Hurd. Melinda, por su parte, vive en un barrio tranquilo donde asegura sentirse "a escala humana". Pasea por las tiendas locales, se relaciona con los vecinos y ha escrito un libro, The Next Day, que verá la luz próximamente.