Pelayo Díaz acudió anoche a ¡De Viernes! para analizar la terapia que había llevado a cabo en el programa con la psicóloga Ana Sierra. Y lo que más sorprendió a todo el mundo fue la confesión inesperada y reveladora que realizó sobre Pablo Alborán.
El diseñador, que es consciente de los rumores que existen sobre una posible relación de él con el cantante en el pasado, rompió su silencio. Y lo hizo para desvelar su postura sobre este asunto.

Pelayo Díaz rompe el silencio sobre Pablo Alborán
Desde hace tiempo, han circulado habladurías que insinúan que Pelayo Díaz y Pablo Alborán podrían haber mantenido una relación sentimental en el pasado. Aunque ninguno de los dos lo ha confirmado ni desmentido con claridad, este tema ha sido recurrente en redes sociales y medios del corazón.
Durante su terapia televisada ayer en ¡De Viernes!, se repasaron algunos de los episodios más personales de la vida del diseñador. De ahí que se abordó desde su trabajo en la moda, hasta sus diferencias con personajes conocidos, y especialmente sus relaciones sentimentales. Y sobre este último asunto se hizo referencia a figuras importantes en su historia, como David Delfín, y entonces llegó el momento clave.
El equipo del programa decidió colocar una canción de Pablo Alborán durante la sesión. En ese instante, Pelayo no pudo evitar sonreír con cierta nostalgia. Fue ahí cuando reconoció: “Es un tema que me han preguntado muchas veces por él, es un momento de mi vida”.
Una frase breve, pero con gran peso emocional. Y suficiente para reavivar la llama de las especulaciones.
La psicóloga Ana Sierra, atenta al impacto emocional, quiso saber más. Le preguntó si alguna vez se había planteado contar públicamente la verdad sobre su posible relación con el cantante malagueño.
Su respuesta fue clara y reflexiva: “No sé qué pasaría si lo contase. No me lo he planteado nunca. No es un tema sobre el que esté preparado para hablar ahora”.
Pelayo Díaz se confiesa sobre el asunto de Pablo Alborán
Ya en el plató, el periodista José Antonio León quiso indagar más. Sin rodeos, señaló: “El momento en el que te hemos visto más nervioso ha sido cuando te han puesto la canción de Pablo Alborán. No sé por qué te da tanto palo contarlo o por qué no estás preparado para contarlo”.
La reacción de Pelayo Díaz fue aún más significativa. No se cerró en banda, pero sí marcó límites con sinceridad. Su confesión fue directa y emocional: “Creo que cada uno tiene un momento para hablar y abrir un capítulo de su vida”.
“Hasta ahora no me veo como que es el momento de hablar de eso. Igual no lo va a ser nunca, porque creo que también es bonito guardarse cosas para uno mismo”.

Con estas palabras, el diseñador dejó claro que, aunque hay algo que contar, su decisión es preservar ese capítulo en la esfera íntima. Al menos, por el momento. Un posicionamiento que muchos espectadores valoraron como maduro y respetuoso.
La limpieza de imagen de Pelayo Díaz
Desde su participación en Supervivientes, Pelayo Díaz ha iniciado un proceso de transformación. Su paso por el reality fue, según él mismo, un punto de inflexión. La exposición, la presión y los conflictos generaron una necesidad profunda de reconciliación personal.
Por eso, decidió someterse a un proceso terapéutico guiado por Ana Sierra, que tuvo carácter privado, pero que también se reveló parcialmente en televisión. En él, el diseñador habló con gran franqueza de sus inseguridades, sus errores del pasado y la necesidad de mejorar como persona.
La mención a Pablo Alborán no fue lo central del proceso, pero, sin duda, fue el momento más comentado y mediático. Porque se trata de una figura muy conocida, muy querida, y muy reservada con su vida sentimental.