En Mónaco no se habla de otra cosa: el hijo del príncipe Alberto y de Nicole Coste, ha debutado como modelo. Justo cuando se cumple una semana desde que Charlene de Mónaco vivió un momento incómodo en Montecarlo, el pasado regresa. La primera aparición de Alexandre Grimaldi fue en la revista británica Tatler, marcando así su entrada en el mundo de la moda.
Días después, Alberto y Charlene confiesan que el joven también fue imagen de la firma Alter Designs. Una firma propiedad de su prima Pauline Ducruet, hija de la princesa Estefanía de Mónaco y sobrina de los príncipes soberanos.

El príncipe Alberto y Charlene de Mónaco desvelan toda la verdad
El pasado se abre paso a zancadas en la vida de Charlene de Mónaco y del príncipe Alberto. Una semana después de la aparición del hijo mayor del soberano, Alexandre vuelve a copar titulares. El joven fue fruto de la relación clandestina de Alberto y la exazafata Nicole Coste, y este no tuvo más remedio que reconocer su paternidad.
Ahora, el príncipe y Charlene han confesado el vínculo que les une a Alexandre: ha trabajado como modelo para su sobrina. Concretamente, para la firma propiedad de la hija de Estefanía que ha contado con su primo para que luzca sus prendas. Después de que el joven debutara como maniquí para Tatler, Paulina Ducret también quiso que este fuera imagen de su colección.
La colección, inspirada en el mundo del motor, se presentó durante la Semana de la Moda de París, donde Alexandre posó junto a su prima. Aunque ha incursionado en la moda, el joven ha declarado que no se imagina desfilando en pasarelas. No obstante, está abierto a ser embajador de marcas que se alineen con su imagen.
Actualmente, estudia administración de empresas en el Reino Unido y planea mudarse a Nueva York para continuar su formación y explorar nuevas oportunidades. Allí espera poder continuar explotando su carrera como modelo haciéndose un hueco en el sector.
Tras ser reconocido como hijo del príncipe Alberto, el joven comenzó a desarrollarse en un ambiente de lujo. No posee título de sucesión, pero esto no le impide acudir a algunos de los eventos más exclusivos que se organizan en el Principado. Lo que, sin duda, le ayuda a la hora de proyectarse como modelo de marcas de lujo.
Charlene de Mónaco conoce las intenciones del hijo del príncipe Alberto
Aunque no está en la línea de sucesión al trono, el hijo del príncipe Alberto mantiene una relación cercana con su padre. Su incursión en el mundo del modelaje es, para el joven un proyecto más que podría beneficiarle de cara a su futuro profesional. Un futuro donde confía en que Alberto le dará una oportunidad.
En entrevistas, ha expresado su deseo de colaborar con su padre y convertirse en embajador global de Mónaco, promoviendo oportunidades para el Principado. Con su incursión en la moda y sus aspiraciones de representar a Mónaco internacionalmente, Alexandre comienza a forjar su camino dentro y fuera del país.
El joven ha luchado para no ser calificado como hijo ilegítimo del príncipe Alberto y ser tratado como al resto de sus hermanos. No obstante, aunque la relación con el soberano sí es cordial, con Charlene de Mónaco continúa siendo tensa.
Sobre todo tras salir a la luz el enfrentamiento que esta tuvo con su madre días antes de la boda entre Charlene y Alberto. Los problemas siguen sin estar resueltos y se respira una calma tensa en el Principado cuando ambas mujeres coinciden.
Sea como fuere, Alexandre ha optado por un perfil discreto mientras se labra un futuro en el mundo de la moda. Lejos de enfrentamientos y con el deseo de colaborar mano a mano con el príncipe Alberto.