La mañana del lunes 23 de junio de 2025 fue muy dura para Rocío Carrasco y su hija, Rocío Flores. Tras 13 años sin verse, ambas se encontraron en la Audiencia Provincial de Madrid. Fue un reencuentro inesperado, pero cargado de mucha tensión.
Madre e hija acudieron temprano al juzgado para declarar en calidad testigos en un juicio contra la productora La Fábrica de laTele. Rocío Flores llegó acompañada de su abogado, con semblante serio. Rocío Carrasco, sin embargo, accedió sola, mostrando una actitud tranquila.

Un reciente encuentro que confirmó, una vez, todos los rumores: Rocío Carrasco y Rocío Flores siguen tan distanciadas como siempre. Y es que ninguna de las dos mostró un gesto de acercamiento en pleno momento de tensión.
Rocío Flores interpuso una demanda contra La Fábrica de la Tele
Rocío Flores reclama un millón de euros por daños morales. La demanda se basa en la difusión de datos personales cuando era menor. Esto ocurrió en el documental Rocío: contar la verdad para seguir viva, emitido en 2021.
La joven acusa a la productora de vulnerar su privacidad. Considera que hubo un ánimo de lucro con su imagen y datos. Por su parte, la defensa afirma que Carrasco dio su consentimiento para esa difusión.
El tribunal deberá determinar si el consentimiento fue válido. También decidirá si la productora cometió un delito de revelación de secretos. Este caso podría sentar precedentes sobre la protección de menores en medios.

Estas fueron las declaraciones de madre e hija en el juicio
Durante el juicio, Rocío Carrasco explicó su postura con claridad. Defendió que el documental fue un proceso terapéutico para sanar heridas acumuladas durante casi 20 años. Por otro lado, también aseguró que compartió su verdad para sanar heridas profundas.
Rocío Carrasco defendió que autorizó el uso de documentos judiciales. También señaló que ya se habían difundido antes por otros medios. Su testimonio fue considerado sólido y convincente por expertos.
Por otro lado, la declaración de Rocío Flores fue menos clara. No alcanzó la contundencia esperada en la sala. Además, en esta situación tampoco hubo diálogo ni acercamiento entre madre e hija durante la vista.

¿Cuál es el origen de este distanciamiento familiar?
La relación entre madre e hija se rompió hace más de una década tras un duro episodio de presunto maltrato. Rocío Carrasco relató en un documental que no puede ver a su hija y que ese quiebre es definitivo. La separación ha sido uno de los conflictos familiares más mediáticos y dolorosos del panorama español.
Desde entonces, el silencio y los tribunales marcaron su relación. La separación se ha convertido en uno de los conflictos familiares más mediáticos. La historia ha sido seguida con gran interés por el público.
Rocío Carrasco confesó en su día que no puede ver a su hija y aseguró que quien quiera entenderlo, que lo haga. Y que quien no, simplemente no lo comprenderá nunca.

Al salir del juzgado, ambas optaron por la discreción. La ex de Antonio David Flores evitó comentar detalles del juicio, simplemente se limitó a negar acercamientos o gestos de reconciliación con Rocío Flores.
Por su parte, la joven también se mantuvo en silencio ante la prensa. Pidió respeto, pero no quiso entrar en polémicas. La resolución judicial podría tener un impacto importante en el mundo mediático.
Este caso plantea preguntas sobre los límites de la privacidad. Y sobre cómo el derecho a la información debe respetar a los menores. Se espera que el tribunal dé una sentencia clara pronto.