Mercadona ha vuelto a sorprender a sus clientes con un lanzamiento inesperado. Se trata de unas patatas fritas con sabor a queso de cabra y cebolla caramelizada. Una mezcla que ha conquistado a quienes ya las han probado en sus primeras apariciones en tienda.
El producto comenzó a verse en el Mercadona de Guadalajara, donde rápidamente llamó la atención. El contraste entre lo salado y lo dulce, junto a la cremosidad del queso, ha generado comentarios muy positivos. Muchos consumidores coinciden en que se trata de un sabor diferente y adictivo.
La clave: sabor original y precio imbatible
Estas patatas fritas vienen en bolsas de 150 gramos. Su precio es de solo 1,20 euros, lo que las convierte en un snack asequible para cualquier ocasión. La relación entre calidad, innovación y coste ha sido fundamental para su éxito inicial.
El perfil de sabor no es común en los aperitivos tradicionales. El queso de cabra aporta intensidad y un toque gourmet. La cebolla caramelizada equilibra con dulzor y crea una combinación que sorprende desde el primer bocado.
Mercadona ha apostado por un concepto distinto, con un guiño a los amantes de las mezclas atrevidas. El resultado es un producto que encaja tanto en reuniones informales como en momentos de picoteo en casa. El formato de 150 gramos también resulta ideal para compartir.
Opiniones y efecto viral en redes
Los primeros clientes que han probado estas patatas han mostrado su entusiasmo. Comentarios como “están buenísimas” o “me han creado una necesidad” circulan ya en redes sociales. Esa reacción espontánea ha potenciado la visibilidad del producto.
Además, el diseño ondulado de las patatas potencia la textura crujiente. Cada mordisco combina la salinidad de la fritura con el contraste del queso y la cebolla caramelizada. Esa secuencia convierte al snack en una experiencia más cercana a lo gourmet que a lo convencional.
El fenómeno sigue creciendo gracias al boca a boca digital. Mercadona no necesita una gran campaña cuando son los propios consumidores quienes difunden el entusiasmo. La fórmula demuestra que un producto innovador y asequible puede convertirse en tendencia rápidamente.
Mercadona ha encontrado un nuevo éxito con estas patatas fritas de queso de cabra y cebolla caramelizada. Su sabor único, unido a un precio competitivo de 1,20 euros por 150 gramos, ha encajado de lleno en el gusto de los clientes. Todo apunta a que este snack seguirá desatando furor en los próximos meses.