El fuerte terremoto de Marruecos deja ya 632 muertos y 329 heridos, según el último balance a las 07:30 horas de la mañana facilitado por el Ministerio del Interior. El seísmo, de magnitud siete en la escala de Richter, se registró poco después de las 23:10 horas de la noche de ayer viernes y sacudió la región en el suroeste de Marrakech.
El epicentro se ha localizado en la localidad de Ighil y ha provocado el derrumbe de numerosos edificios en la zona y cercanías. Referente al balance de víctimas y heridos, se teme que pueda aumentar con el paso de las horas. El seísmo ha afectado también a zonas rurales montañosas y de difícil acceso.
«Las autoridades locales, los servicios de seguridad y Protección Civil de todas las provincias y regiones afectadas se han movilizado para intervenir, proporcionar la asistencia necesaria y evaluar los daños», continua el comunicado del Ministerio del Interior, que recomienda «mantener la calma y evitar el pánico» a la ciudadanía.
Anna y Joan se encontraban en Marrakech
Anna Páez y Joan Bilbao, son dos turistas catalanes que se encontraban cenando en el ático de un edificio de Marrakech en el momento que se ha producido el terremoto. Por suerte los dos se encuentran bien. En declaraciones al 324 de TV3, Anna y Joan han compartido con la audiencia los momentos de pánico y terror que han vivido.
«Estábamos cenando en un restaurante justo en la plaza principal de Marrakech y ha empezado a temblar todo. Estábamos en la tercera planta y en aquel momento no sabíamos qué estaba pasando. Yo no sabía qué hacer, me quería quedar allí. Después empezamos a bajar. Había mucha gente y todo el mundo estaba muy asustado y chillando», ha relatado Anna.
«No sabíamos qué hacer, si salir a la calle o no», dice Joan. «Los del restaurante nos dijeron que saliéramos y por suerte estábamos en la plaza que era muy grande y estaba todo el mundo», concluye. Además, Anna cuenta que se esperaban réplicas y por ese motivo decidieron intentar llegar al hotel. Finalmente, durmieron todos en la planta baja de este.
«Estamos bien, estábamos cenando en la terraza de la tercera planta de un restaurante cuando de repente ha empezado a moverse todo», ha publicado en sus redes sociales Joan.
«Creo que aún no somos conscientes de que acabamos de sobrevivir al terremoto más grande de la historia de Marruecos. Nosotros estamos aún en shock, pero bien. No sé cómo describir lo que estamos viviendo», ha continuado el catalán sobrepasado por la complicada situación vivida.