El arranque del otoño está dejando un panorama poco habitual en buena parte de España. Durante los últimos días, el sol y las temperaturas suaves han dominado la escena, con cielos despejados en muchas regiones. Sin embargo, no todas las zonas podrán mantener ese clima tranquilo.
El meteorólogo Roberto Brasero ha lanzado un aviso claro: en algunos territorios será necesario tener el paraguas a mano. El mal tiempo no será generalizado ni duradero, pero podría sorprender a quienes confíen en que el sol se mantendrá sin cambios.
Roberto Brasero anuncia la llegada de más lluvias
Aunque la borrasca que afectó al país comienza a remitir, hoy todavía quedarán algunos coletazos de inestabilidad en el este y el sur peninsular. Sin ir más lejos, en el litoral de Cataluña se esperan lluvias que podrían ser localmente intensas. Mientras tanto, en la Comunidad Valenciana, Ceuta y Melilla también podrían registrarse precipitaciones.
En Canarias, la nubosidad irá en aumento, con probabilidad de lluvias en las medianías y en las islas orientales. El norte de Galicia y el Cantábrico, por su parte, amanecerán con nieblas o nubes bajas. Ya por la tarde, podrían desarrollarse nubes de evolución en sierras del sur, dejando algún chubasco puntual. Aun así, la tendencia general seguirá siendo de estabilidad.
Un frente atlántico romperá la calma este sábado
El ambiente estable continuará hasta el fin de semana en la mayor parte del país, con cielos despejados y temperaturas más altas de lo normal para estas fechas. Pero el sábado se espera un cambio. En palabras de Roberto Brasero: “El sábado podría llegar un frente a Galicia y recorrer rápidamente el extremo norte”.
Ese frente atlántico afectará sobre todo a seis comunidades: Galicia, Asturias, Cantabria, Vizcaya, Guipúzcoa y Aragón. Las lluvias serán débiles y pasajeras, avanzando desde el noroeste hacia el Cantábrico y los Pirineos, para luego ir disipándose a lo largo del día.
Mientras tanto, el resto del territorio seguirá disfrutando de tiempo seco y cálido. En Sevilla se alcanzarán los 33 °C, Madrid y Guadalajara rondarán los 28 °C, y Zaragoza se quedará en 25 °C. Unas cifras más propias de verano que de pleno otoño.
Aunque el ‘veroño’ parezca resistirse a marcharse, Roberto Brasero recuerda que el otoño ya está en marcha. Las lluvias aún serán aisladas y de poca intensidad, pero conviene no confiarse: el cielo puede dar sorpresas en cualquier momento.
Por ahora, solo seis comunidades tienen motivos para sacar el paraguas este fin de semana. Pero como apunta Roberto Brasero, el frente del sábado será la primera señal de que el tiempo estable no durará para siempre.