El Barça encara una carencia clara en la demarcación de lateral derecho. No cuenta con un especialista natural en esa posición alternativo a Jules Koundé. Eso ha llevado a buscar opciones fuera del club con perfil adecuado y proyección.
Una de esas alternativas fue Andrei Ratiu, lateral derecho del Rayo Vallecano. El Barça lo valoró en ciertos ámbitos del club como refuerzo potencial. Su perfil encajaba bien desde un punto de vista táctico y de planificación futura.
Las negociaciones que no cuajaron
Durante un tiempo hubo contactos entre el Barça y el entorno de Andrei Ratiu, en busca de explorar su incorporación. No prosperaron por varios motivos clave. En especial, la cláusula de rescisión fijada en 25 millones de euros fue una barrera importante.
El club catalán llegó a poner sobre la mesa una oferta de 18 millones, que fue rechazada sin contemplaciones. Además, el Rayo Vallecano mostró escasa predisposición a negociar y prefirió mantener al jugador en su plantilla. Esa negativa cerró cualquier posibilidad inmediata de acuerdo.
Factores adicionales que frenaron la operación
No fue solo el aspecto económico lo que paralizó la operación. También se tomaron en cuenta algunas disfunciones defensivas del jugador durante esta temporada. El Barça evalúa cada detalle del desempeño real y busca garantías en todos los ámbitos.
Además, el paso del tiempo y el contexto competitivo de LaLiga influyeron en que la operación no se planteara en firme. Las prioridades del club cambiaron, y el fichaje quedó finalmente aparcado. La dirección deportiva entiende que no puede asumir riesgos en un puesto tan sensible.
Seguimiento en la agenda del Barça
El interés por Andrei Ratiu surgió hace algunos meses. Se le consideró una alternativa interesante para dar descanso a Jules Koundé o incluso liberar opciones defensivas en el centro. Su nombre apareció de manera recurrente en reuniones internas de planificación.
Entre los actores que lo vieron con buenos ojos está Deco, director deportivo del Barça, que lo tenía en cuenta como perfil viable para reforzar el flanco derecho. Sin embargo, la falta de acuerdo económico terminó pesando más que los aspectos deportivos. Con el mercado en movimiento, la directiva culé busca soluciones más realistas.
El Barça volvió a considerar reforzar el lateral derecho ante la falta de especialistas. Andrei Ratiu estuvo en su radar y hubo contactos para estudiarlo. La elevada cláusula, la negativa del Rayo y algunas carencias tácticas impidieron que avanzara la operación.