El inicio de septiembre ha llegado con un cambio brusco en el tiempo, tras un agosto marcado por olas de calor históricas en España. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha lanzado alertas por tormentas intensas y un descenso generalizado de las temperaturas. Hablamos de un giro que anticipa un ambiente más otoñal, tras un fin de semana de calor.
En concreto, la AEMET ha activado avisos naranjas en varias comarcas de Cataluña, especialmente en Barcelona y Gerona. Por allí las precipitaciones podrían alcanzar hasta 50 litros por metro cuadrado en apenas una hora. De hecho, durante esta pasada madrugada ha llovido con ganas en esa región, y las precipitaciones regresarán por la tarde.

En el Pirineo y el este catalán, las tormentas vendrán acompañadas de granizo, aumentando el peligro en zonas de montaña y carreteras secundarias. La situación se debe a la interacción de un frente que cruza el Mediterráneo oriental y otro que se aproxima desde el noroeste.
En estas otras comunidades también se esperan lluvias
El cambio de tiempo no se limitará a Cataluña. Galicia y el Cantábrico han amanecido con cielos nubosos y lluvias, que ganarán extensión durante el día. En Baleares también se esperan chubascos, que podrían ser fuertes en el este de las islas.
En la mitad norte peninsular se desarrollará nubosidad de evolución con probabilidad de tormentas en áreas montañosas. La Ibérica oriental y la Comunidad Valenciana recibirán chubascos intensos hacia última hora. Mientras, en el sur y oeste del país disfrutarán de cielos más despejados pero con un ambiente más fresco.
La bajada de temperaturas, la otra noticia del día
Uno de los cambios más llamativos será el desplome térmico que se notará en buena parte de la península, salvo en puntos muy concretos. Ciudades como Burgos apenas superarán los 12 °C, mientras que Teruel rondará los 21 °C. En Sevilla, Zaragoza o Valencia los termómetros no rebasarán los 31 °C, y en áreas mediterráneas las máximas estarán por debajo de 34 °C.

El contraste con días anteriores será evidente, marcando la llegada de un tiempo más otoñal. De todas formas, debido a los vientos de poniente, en zonas del Mediterráneo y de las Baleares las temperaturas seguirán siendo calurosas.
En este sentido, el viento será otro factor a vigilar. En el Cantábrico se esperan rachas fuertes, mientras que el cierzo soplará con intensidad en el valle del Ebro. En las Baleares y el Ampurdán predominará la Tramontana, y en Canarias los alisios traerán cielos nubosos y lluvias débiles en islas de relieve elevado.
Según la AEMET, este episodio de inestabilidad no será aislado. La entrada de sucesivos frentes atlánticos podría mantener el ambiente otoñal durante la primera quincena de septiembre. Esto provocará altibajos con las temperaturas, que irán subiendo y bajando, aunque todo indica que, de cara el fin de semana, los valores subirán.