El primer fin de semana de octubre se presenta con una atmósfera engañosa. A pesar de estar en pleno otoño, las temperaturas parecen más propias de comienzos de septiembre. Las tardes serán cálidas, con máximas que incluso superarán los 30 grados en varias zonas del sur y del interior peninsular.
Las mañanas, sin embargo, mantienen ese toque otoñal. Los amaneceres y las noches son fríos, especialmente en el norte y en zonas altas del interior. Una combinación que lleva a muchos a sacar el abrigo a primera hora y quedarse en manga corta por la tarde.

Un fin de semana de contrastes: del calor veraniego al aire fresco
Según ha explicado Roberto Brasero, el popular meteorólogo de Antena 3, “este sábado aún disfrutaremos de temperaturas altas, pero el domingo refrescará notablemente”. Y es que el protagonista del cambio será un frente atlántico asociado a la borrasca Amy. Está situada al noroeste de Europa, que afectará a Irlanda y Gran Bretaña, pero también dejará su huella en el norte de España.
Durante la jornada del sábado, se esperan lluvias en Galicia y Asturias desde la mañana, extendiéndose al resto del Cantábrico por la tarde. En el norte de la Ibérica y en la cara norte del Pirineo también podrían registrarse algunas precipitaciones. En el resto de la Península predominará el tiempo estable, con nubes altas a primeras horas y una tarde más soleada.
En Baleares, los intervalos nubosos podrían dejar algún chubasco débil en el norte, aunque tenderá a despejar. Mientras tanto, en Canarias dominarán los cielos despejados, salvo por la nubosidad baja en el norte de las islas.
Temperaturas extremas antes del cambio
Las temperaturas seguirán siendo muy altas este sábado: En Sevilla se esperan 35º, en Murcia hasta 34º, y en ciudades como Madrid, Málaga o Zaragoza hasta los 30º. También hará calor en el norte, con 26º en Burgos y Bilbao, y 27º en Pamplona. Solo en Galicia se notará un ligero descenso por la entrada del frente.

Sin embargo, el domingo llegará el cambio que anticipa Brasero. “Se contempla un descenso de hasta 8º de golpe”, ha advertido el meteorólogo. Afectará a buena parte del norte y este peninsular: Castilla y León, La Rioja, Navarra, Aragón, Asturias, Cantabria, País Vasco, Madrid, Cuenca, Valencia y Murcia.
De hecho, Murcia pasará de 34º a 27º, Valladolid de 28º a 20º y Zaragoza de 30º a 23º. Aunque seguirán siendo temperaturas suaves, el contraste se notará especialmente por el viento del norte, más fresco y con rachas fuertes en algunas zonas.
El domingo también traerá lluvias dispersas en el litoral catalán, Baleares y el Cantábrico oriental. En el resto del país, el ambiente será más soleado, pero con una sensación térmica más baja. Aun así, según los pronósticos, desde el martes volverán a subir las temperaturas, devolviendo ese calor otoñal que ha marcado el arranque de octubre.
En palabras de Brasero, el panorama es claro: “Será un breve respiro de frescor antes de otra semana de sol y tardes cálidas”. Un otoño que, por ahora, sigue resistiéndose a llegar del todo.

