Estamos en un mundo donde en las redes y en la televisión se proclama el cuidado del cuerpo como algo fundamental para el bienestar. Sin embargo, surge la pregunta ¿Es suficiente con cuidar el cuerpo?. A pesar de incorporar una alimentación sana y actividad física, falta algo esencial para el bienestar completo.
El médico y coach, Mario Alonso Puig, luego de ejercer la Cirugía General y Aparato Digestivo en Estados Unidos y España, se dedicó a estudiar el desarrollo personal. Y señala que muchos ignoramos un aspecto clave del bienestar que puede transformar nuestra vida de forma definitiva.

Descubriendo el motor del bienestar verdadero
Con base en sus investigaciones, Puig señala que la verdadera paz se encuentra en un hábito mental. En una entrevista en el pódcast "A lo grande", Puig reveló que el “interés y curiosidad por aprender” es la base para alcanzar un estado pleno de bienestar mental y físico.
Este impulso por descubrir y entender, dice, no debe verse limitado por la edad ni por la formación académica. “La sabiduría no se mide por títulos”, afirma. Se trata, en su opinión, de una actitud frente a la vida que puede cambiarlo todo.

El riesgo de rendirse mentalmente
Puig advierte sobre, lo que él llama “ceguera intelectual”, una forma de bloqueo interior. Es la idea de que ya no hay nada más que aprender, de que todo está dicho. Para él, esa postura puede conducir no solo al estancamiento, sino también al malestar emocional.
Dejar de buscar nuevas experiencias o conocimientos limita nuestra capacidad de sentirnos bien. Incluso, apunta, podría abrir la puerta a trastornos como la depresión. Por eso insiste en que la curiosidad es una forma de salud mental.

La salvación del aprendizaje
El efecto positivo de este hábito no se queda en lo psicológico. Puig señala que mantener la mente activa cambia la forma en que pensamos y eso influye directamente en nuestro cuerpo. El cerebro reacciona, mejora su estructura y activa circuitos que favorecen el bienestar.
No se trata de aspirar a grandes logros intelectuales. Más bien, de abrirse a cada día con la actitud de quien quiere comprender más y vivir mejor. Como él mismo expresa, ha aprendido mucho de personas sin formación académica, pero con gran sabiduría de vida.
Al final, la propuesta de Mario Alonso Puig es tan sencilla como poderosa. La paz no llega solo por cuidar el cuerpo, sino por mantener viva la mente. Y lo único que se necesita para lograrlo es seguir teniendo curiosidad.