Una persona con gafas transparentes y expresión seria junto a un emoji con ojos brillantes y lágrimas de emoción.

La princesa Estefanía reaparece tras decir adiós y en Mónaco se fijan en este detalle

Estefanía de Mónaco anuncia su jubilación, pero sigue comprometida con la lucha contra el sida

Hace pocos días, Estefanía de Mónaco  sorprendió al anunciar su jubilación. No es común que un miembro de la  realeza con tanta presencia pública decida retirarse. Sin embargo, tras cumplir 60 años, dejó claro que era el momento de dar un paso atrás.

En declaraciones a Point de Veu, la princesa explicó que siente que ha dado y dicho todo lo necesario. “Ya no le veo sentido a hablar de mí”, aseguró. A pesar de su retirada, dejó abierta la puerta a seguir implicada en causas solidarias.

Estefanía de Mónaco con gafas y cabello oscuro lleva una chaqueta blanca y roja frente a un fondo colorido.
Estefanía de Mónaco ha sorprendido a todos al anunciar su jubilación | Instagram, @grimaldisofmonaco

La princesa añadió que “he dado suficiente y he dicho todo lo que tenía que decir”. A pesar de esta decisión, manifestó que seguiría activa en ciertas áreas, especialmente en aquellas causas solidarias que siempre ha defendido. 

Pero su compromiso con la lucha contra el sida es algo que no piensa abandonar. Ha prometido mantenerse implicada en esta causa y ha cumplido su palabra con rapidez. Este fin de semana, Estefanía reapareció públicamente en un evento benéfico dedicado a esta enfermedad, demostrando que su espíritu solidario sigue intacto.

Un apoyo familiar incondicional

En la gala de lucha contra el sida de Mónaco 2025, Estefanía no estuvo sola. Acompañada por su hermano, el príncipe Alberto, ambos mostraron un frente unido. Juntos saben que su presencia en equipo genera un mayor impacto y visibilidad para las causas que apoyan.

Además, estuvieron presentes Camille Gottlieb y Louis Ducruet, dos de los hijos de Estefanía, junto con su nuera Marie Chevallier. La familia, como siempre, fue un pilar fundamental para la princesa en este evento tan significativo. Su presencia conjunta reflejó el fuerte vínculo familiar y la unión en torno a esta lucha.

Cuando anunció su jubilación, Estefanía ya destacó la importancia de sus tres hijos como apoyo en sus compromisos solidarios. La princesa aseguró que sus hijos están dispuestos a seguir acompañándola, especialmente en la lucha contra el sida. Este respaldo familiar ha quedado patente en su última aparición pública.

Tres personas posan sonrientes frente a una pintura de paisaje en una sala iluminada -dos de ellas son Alberto de Mónaco y Estefanía de Mónaco-.
Estefanía y Alberto, unidos por la solidaridad | Instagram, @palaisprincierdemonaco

Compromiso y legado en la lucha contra el sida

La fundación que lleva Estefanía tiene un origen muy personal. Surgió tras conocer el caso de una amiga que padeció esta enfermedad y se encontró sin recursos. Desde entonces, la princesa se ha volcado en ayudar y apoyar esta causa, haciendo de su organización un referente en Mónaco.

Durante el evento, Estefanía subió al escenario para agradecer el apoyo recibido. Agradeció especialmente a su familia y a los presentes que hacen posible el trabajo de su fundación. Su emotiva intervención dejó claro que, aunque se jubile de la vida pública, su compromiso con la solidaridad no disminuirá.

Esta gala fue una muestra más del legado que Estefanía quiere dejar. A lo largo de los años, ha trabajado incansablemente para visibilizar la enfermedad y apoyar a quienes la sufren. El respaldo de sus hijos y su hermano es un testimonio de que esa labor continuará.

Mujer de cabello corto y gafas vestida de blanco sonriendo al aire libre con personas uniformadas y desenfocadas al fondo
Una princesa fiel a su causa | Instagram, @palaisprincierdemonaco

Una imagen distinta, pero con su sello personal

En esta ocasión, la princesa sorprendió con un estilo más sobrio y sencillo que rompió con la tradición, pero que reflejaba la seriedad del evento. Nada de vestidos de gala ni looks demasiado formales. Estefanía llevó una camisa blanca combinada con una corbata negra y pantalones oscuros.

El blanco y negro fue el código de vestimenta que marcaron muchos de los asistentes, incluido el príncipe Alberto y otros miembros de la familia como Louis Ducruet y Camille Gottlieb. Este detalle unió a los presentes visualmente, mostrando cohesión y respeto por la causa.

Estefanía, fiel a su estilo, llevó su corte de pelo corto y sus gafas redondas negras, aportando ese toque personal que siempre la ha caracterizado. A pesar de su retirada, su imagen sigue transmitiendo fuerza y autenticidad.

Ausencias destacadas y prioridades personales

Aunque la mayoría de la familia estuvo presente, hubo una ausencia notable. Pauline Ducruet, la hija menor de Estefanía, no pudo asistir al evento. Actualmente está en París participando en eventos relacionados con la Semana de la Moda.

Pauline, apasionada del mundo de la moda y dedicada a este sector, priorizó sus compromisos profesionales. Sin embargo, su ausencia no implica falta de apoyo. En otras ocasiones ha demostrado ser una gran aliada de su madre y su labor solidaria.

Así, la familia de Estefanía se mantiene unida en torno a sus causas, combinando sus propias vidas y proyectos con el compromiso social que siempre los ha caracterizado.