El rey Juan Carlos ha protagonizado un momento sin precedentes y ha sido durante su última salida por Sanxenxo, poco antes de abandonar nuestro país este pasado domingo. Ha pasado seis días en la localidad pontevedresa donde ha disfrutado de la vela, su gran pasión. Aunque Juan Carlos I ha revelado algo que ha causado gran impacto entre los seguidores de la Casa Real.
También ha recibido la visita de su hermana, la infanta Margarita. Le han acompañado su cuñado, Carlos Zurita, y sus sobrinos Alfonso y María Zurita. Ha sido una estancia familiar, pero no exenta de tensión.
El emérito ha sorprendido a todos debido a que ha roto su habitual silencio y lo ha hecho ante las cámaras, con un gesto desafiante. Juan Carlos ha estallado contra los periodistas que lo esperaban: “Mira, voy sin silla de ruedas”, ha dicho con ironía. A continuación, ha añadido: “¡Cuantas más mentiras digáis, me veréis mejor!”, sus palabras han causado un enorme revuelo.
Casa Real guarda silencio ante las declaraciones de Juan Carlos I
Casa Real aún no se ha pronunciado aunque no es habitual que el rey emérito se exprese con tanta vehemencia. Su declaración ha sido interpretada como una crítica directa a la prensa pero también como una muestra de fortaleza personal.
Con un simple “claro”, Juan Carlos I ha despejado dudas y ha confirmado lo más grande: que se encuentra bien. En buen estado de salud y con ánimo fuerte. Ha querido zanjar rumores y especulaciones y su aparición, caminando sin ayuda, ha reforzado esa imagen.
Eso sí, ha evitado pronunciarse sobre temas más delicados. Cuando Juan Carlos I ha sido preguntado por su posible regreso definitivo a España, ha preferido callar, no ha dicho ni una palabra y ha dado el silencio por respuesta. Una ausencia de respuesta que ha dicho mucho.
Nadie esperaba en Casa Real lo último que ha hecho el rey Juan Carlos
Su breve estancia en Galicia ha sido intensa debido a que ha sido muy comentada. Ha estado cargada de gestos y ha dejado mensajes entre líneas. Desde Casa Real, no se ha emitido ningún comunicado oficial pero se ha notado incomodidad en el entorno más cercano.
Juan Carlos ha vuelto a ser protagonista debido a que ha elegido Sanxenxo como escenario y ha dado una imagen renovada. Ha desafiado a quienes lo daban por acabado y ha recordado que, pese a todo, sigue teniendo presencia.
La expectación ha sido máxima y la polémica, inevitable. El rey emérito ha hablado y sus palabras, pocas pero potentes, han resonado en Zarzuela. Porque cuando Juan Carlos I rompe su silencio, la repercusión es inmediata y esta vez, ha confirmado lo más grande.