El príncipe Andrés con expresión seria y un emoji de preocupación con una gota de sudor sobre un fondo de flores desenfocadas

Importante: revelan un dato sobre el príncipe Andrés que asusta a la Familia Real

La nueva información sobre la vida privada del príncipe Andrés inquieta seriamente a la Familia Real

La prensa británica ha destapado una revelación sobre el príncipe Andrés que ha generado auténtica preocupación dentro de la Familia Real. La noticia surge en plena ola de titulares sobre el duque de York, que vuelve a ocupar el foco por nuevas informaciones que apuntan a episodios delicados sobre su pasado.

En esta ocasión, las advertencias no provienen de rumores superficiales, sino de investigaciones, testimonios y documentos que ya circulan en televisión y librerías. Todo ello ha encendido la alarma en Buckingham, donde el silencio oficial contrasta con la inquietud evidente. ¿Qué ha ocurrido realmente para que esta situación genere tanto miedo?

El príncipe Andrés con traje oscuro y corbata amarilla, de perfil, al aire libre con hojas verdes de fondo
El príncipe Andrés vuelve a estar en el centro de la polémica por nuevas revelaciones | Europa Press

Revelan un dato que deja muy tocado al príncipe Andrés

La televisión británica emitió el documental Andrew & Fergie: El duque y la duquesa del exceso. Este coincidió con el lanzamiento del libro El ascenso y la caída de la Casa de York, escrito por Andrew Lownie. Ambos han dibujado un retrato incómodo del príncipe Andrés y Sarah Ferguson, señalando sus gastos desmesurados, su vida de excesos y sus polémicos vínculos económicos.

Lo más impactante, sin embargo, fue la afirmación de que podría existir material comprometedor que involucraría al duque de York. Según Lownie, "creo que una de las cosas más preocupantes que descubrí fue la cantidad de kompromat que debía haber sobre Andrés. Sabemos que Jeffrey Epstein había filmado a gente en su casa".

El término kompromat hace referencia a pruebas sensibles destinadas al chantaje. Lownie sostiene que antes de morir, Epstein habría vendido parte de ese material a agencias de inteligencia extranjeras. Esto incluye el Mossad, los servicios secretos libios e incluso organismos rusos.

El príncipe Andrés con vestimenta formal y adornos dorados en un evento al aire libre.
Los vínculos de Andrés con Jeffrey Epstein vuelven a generar desconfianza | Europa Press

"Hay material de mis fuentes que habla de kompromat en China, Libia, Oriente Medio y otros lugares. O sea, debe haber muchísimos vídeos sexuales circulando, y me sorprende que no hayan aparecido en internet", añadió el escritor.

La posibilidad de que existan grabaciones con el duque como protagonista ha provocado un nuevo terremoto mediático. Aunque no hay pruebas públicas que respalden estas acusaciones, la simple sospecha ha dejado muy tocado al príncipe Andrés, que ya arrastraba una imagen deteriorada desde su relación con Epstein.

La información del príncipe Andrés asusta a la Familia Real

La afirmación de que pudiera haber material sensible sobre el duque ha encendido las alarmas en Buckingham. Así lo resumió el periodista Richard Eden: "¿Quién sabe qué podría salir a la luz? Creo que la Familia Real vive con miedo de lo que pueda salir a la luz".

Este clima de incertidumbre ha colocado nuevamente al príncipe Andrés en el centro de la polémica, comprometiendo a toda la institución. En un momento en el que la monarquía intenta reforzar su imagen de estabilidad, la amenaza de filtraciones o chantajes supone un riesgo enorme.

El príncipe Andrés y Carlos III con trajes formales, uno de ellos con una corbata a rayas y el otro con una corbata lisa, posando en diferentes entornos.
El rey Carlos teme filtraciones del príncipe Andrés que comprometan a la institución | Europa Press, Twitter, es.catalunyadiari.com, @radio580nic

La preocupación no solo radica en el pasado, sino en lo que podría llegar. Si estas supuestas grabaciones vieran la luz, la reputación del duque de York y de toda la Familia Real quedaría gravemente dañada. La Casa de Windsor teme que surjan revelaciones aún más comprometedoras que agraven la crisis.

Mientras tanto, el príncipe Andrés mantiene un silencio absoluto. Su ausencia de explicaciones alimenta la desconfianza, mientras que su participación en eventos familiares refleja un intento de normalización. Sin embargo, la sombra de lo que podría descubrirse pesa cada vez más sobre él y sobre la institución.