Brillan dentro y fuera del agua. Dennis González e Iris Tió forman una de las parejas más prometedoras de la natación artística internacional. Ahora, llegan al Mundial de Singapur con una clara misión: quieren repetir el éxito que ya lograron en el reciente Campeonato Europeo.
Con apenas unos meses como dúo, su conexión dentro y fuera del agua ya ha dado frutos. La química entre ellos es evidente desde el primer momento, y las ganas de seguir creciendo juntos en cada rutina, también. Ahora, han dado una entrevista para Mundo Deportivo.
Iris Tió y el drama más desconocido de su 'pareja', Dennis González
"Vamos con muchísimas ganas, queremos demostrar todo el trabajo que hemos hecho y nos merecemos acabar bien", cuenta Iris. A lo que Dennis añade: "Es verdad que llevamos toda la temporada pensando en el Mundial".
Se conocen desde niños, ya que ambos se iniciaron en el club CN Kallípolis, aunque por edad nunca coincidieron en equipo. "Iris era mi ‘guau’, la veía y ¡todo lo hacía bien!", recuerda Dennis, que no lo tuvo fácil para llegar hasta aquí.

Su madre, entrenadora de natación artística, fue quien le acercó a este deporte, pero no lo eligió de inmediato. "Probé el taekwondo y el waterpolo antes. Hasta que no vi a Pau Ribes hacer el dúo con Gemma Mengual no sabía que eso podía hacerlo un chico", cuenta.
Empezó a los 12 años, y en el colegio sufrió acoso. La natación fue su vía de escape: "Fue lo que más me evadió, lo que más me ayudó a controlarme en esos momentos de rabia".
Dennis también destaca el papel de Anna Tarrés en su carrera: "Fui a ver varios clubs y ninguno me aceptó porque no querían chicos. Fue Anna Tarrés la que le dijo a mi madre que me llevase al Kallípolis".
Iris Tió y Dennis González tienen una gran complicidad
Ambos coinciden en elogiar a su entrenadora, Andrea Fuentes: "Es una super luchadora en todos los sentidos", afirma Dennis. Iris completa: "Es una luchadora valiente". Su preparación combina entrenamientos físicos, meditación y rutinas curiosas.
Dennis se pone colonia antes de competir "porque cuando nos abrazamos antes de tirarnos al agua, respiras eso y no la coreo". Iris, por su parte, confiesa que entra con el pie derecho a la piscina y se coloca la pinza cuatro veces.

Ambos comparten un mismo sueño: "Una medalla de oro olímpica". Sin embargo, Dennis aspira aún más alto: "Yo sueño con ser un referente y, por ejemplo, superar el récord de medallas de Ona Carbonell".
Ambos tienen claro su objetivo: seguir creciendo como equipo, disfrutar del camino y dejar huella en la natación artística. Con talento, esfuerzo y complicidad, Dennis e Iris apuntan alto. Y esto, dicen, es solo el comienzo.