Joan Manuel Serrat no necesita presentación. Su voz y su poesía hecha canción lo han convertido en uno de los artistas más influyentes. Durante más de cinco décadas, ha compuesto la banda sonora de varias generaciones con temas que han trascendido el tiempo.
Aunque su carrera ha sido ampliamente reconocida, hay una faceta que el cantautor siempre ha preferido mantener al margen: su vida personal. A lo largo de los años, ha sido muy reservado con lo que ocurre fuera del escenario.

La boda secreta de Joan Manuel Serrat y Candela Tiffón
Detrás del artista hay una historia de amor sólida y longeva con Candela Tiffón, la mujer con la que se casó en secreto en 1978. Ella tenía apenas 20 años y él 34. En aquella época, en la que la mayoría de edad era a los 21, la relación generó controversia.
Sin embargo, para Candela fue algo inevitable, un 'flechazo' que marcaría el inicio de una vida en común alejada de los focos. Desde entonces, ambos han optado por construir su relación en la más estricta intimidad, lejos del ruido mediático.
Candela, hija de un respetado director ferial en Barcelona, destacó desde joven por su elegancia y discreción. Aunque intentó abrirse camino en el mundo de la moda y la publicidad, pronto lo abandonó para volcarse en la crianza de sus dos hijas: María y Candela.

Así es la familia de Joan Manuel Serrat
La mayor, María, tuvo un recorrido académico ligado primero a la Farmacia y después al Periodismo. Este cambio la llevó a conocer a Stuart Smith, entrenador australiano con quien ha formado una familia con dos hijos: Oliver y Nicholas.
Por su parte, la hija menor, Candela, ha seguido los pasos artísticos de su padre, enfocándose en el teatro. En 2019 contrajo matrimonio con el actor Daniel Muriel y actualmente son padres de dos niños, Mérida y Daniel.
Antes de formar esta familia, Serrat vivió una relación con la modelo Mercedes Doménech, fruto de la cual nació su primer hijo, Manuel. Aunque ha preferido mantenerse alejado del ámbito público, es padre de dos hijas: Luna y Lucía.
Luna se ha abierto camino en el mundo de la interpretación y es activa en redes sociales, mientras que Lucía emprendió una marca de ropa vintage junto a una amiga. Así, el legado artístico de Serrat sigue creciendo, no solo en los escenarios, sino también en su propia familia.