El pasado martes 5 de septiembre conocimos la triste noticia de la muerte de María Teresa Campos. La periodista murió a los 82 años en un hospital madrileño. Una noticia que cayó como un jarrón de agua fría a todos sus familiares, amigos, compañeros de profesión y seguidores.
El pasado 3 de septiembre, Campos ingresó en un hospital de la capital española por su delicado estado. Hacía tiempo que la presentadora estaba alejada de los medios de comunicación, ya que sufría varios problemas de salud. Eso sí, en todo momento, estuvo acompañada de sus seres queridos.
Todos los medios se hicieron eco de su fallecimiento y grandes personalidades del mundo de la comunicación han querido despedirse de la estrella televisiva. Karmele Marchante, compañera de la presentadora durante muchísimos años, se encuentra completamente destrozada por lo sucedido.
La desconocida relación entre Karmele y la Campos
Hasta el momento, no había salido a la luz la supuesta amistad entre la colaboradora y la presentadora. Es bien sabido que las dos mujeres habían sido compañeras de profesión y hasta habían compartido plató en muchas ocasiones. Pero se desconocía la relación entre ambas fuera del ámbito profesional.
A raíz del ingreso de María Teresa Campos en el hospital por una insuficiencia respiratoria aguda, Karmele Marchante se mostró muy impactada por lo sucedido. De esta forma, Marchante quiso de dedicarle unas palabras de ánimo a su compañera.
«María Teresa Campos, ingresada de gravedad. Me ha impactado esta triste noticia. Espero que se recupere. Para mí es una maestra pionera en el periodismo. Y también una amiga muy querida. Siempre contigo, Teresa», publicó en Instagram.
El día de la muerte de la madre de Terelu Campos y Carmen Borrego, Karmele Marchante publicó el siguiente texto: «Sobre su trayectoria profesional ya se ha dicho todo. Prefiero a la amiga y brillante trabajadora. Generosa, pionera, inventora de espacios nuevos, incansable, alegre», empezó relatando.
«Genial y muy buena gente. Podría contar muchas cosas y todas buenas. Ahora ya está en un lugar que presumo mejor. Yo siempre la recordaré con esos ojos brillantes y una mente privilegiada. La quise y la seguiré queriendo», concluyó la de Tortosa.
Un último regalo
Así pues, con estas palabras, Marchante sacaba a la luz una relación de amistad desconocida por muchos. Además, el día de la capilla ardiente de su compañera y amiga, la periodista le hizo su «último regalo» lleno de significado. Especialmente por sus colores morados.
«Mi pequeño y último regalo para acompañar a la que fue ante todo amiga y luego compañera y maestra. Solo puedo decir de María Teresa cosas bonitas y buenas. Y como odio los tópicos prefiero esta despedida del color feminista», sentenció visiblemente destrozada.