Kensington Palace ha anunciado el paso que ha dado el heredero británico para preservar el medioambiente. En su comparecencia en el Foro de Economía Azul y Finanzas de Mónaco, instó de forma urgente a líderes mundiales a emprender acciones inmediatas. Acciones decisivas que protejan los mares y, por ende, salven la salud del planeta en su totalidad.
De esta manera, desde Kensington se confirma la implicación de la Familia Real en la preservación y conservación de la naturaleza. El heredero británico pronunció un discurso significativo, enfatizando que los océanos constituyen más del 70% de la superficie terrestre. Además, solo un 3% de ellos disfruta de una protección completa, evidenciando un importante retraso frente al objetivo de proteger el 30% antes de 2030.

Kensington Palace confirma la determinación del heredero británico
Kensington Palace se ha posicionado a la vanguardia en la protección del medioambiente. La mayoría de sus miembros muestra una clara necesidad de proteger y disfrutar de la naturaleza. Entre ellos destaca el rey Carlos III o el príncipe Guillermo, quien fue el gran protagonista en el Foro de Economía Azul y Finanzas.
Allí, Kensington aprovechó la cobertura internacional para anunciar lo más grande de su representante: su lucha por la protección de los océanos. El heredero al trono británico pronunció un discurso emotivo a la par que urgente dirigido a todos los líderes mundiales. A ellos les exigió una mayor implicación en la conservación y protección de los océanos.
Sobre todo a actuar de manera inmediata ante la amenaza del cambio climático y las consecuencias que ya se están produciendo. El calentamiento global afecta a todos y existe una urgencia a proteger nuestros mares, vitales para la salud del planeta y el equilibrio del ecosistema.
Guillermo calificó la situación como “incomparable a cualquier otro desafío” enfrentado, subrayando que elevadas temperaturas marinas, contaminación plástica y sobrepesca están agotando los fondos marinos. Añadió que estos sustentan a más de tres mil millones de personas, regulan el clima y producen la mitad del oxígeno indispensable para la vida.
Desde Kensington afirman que, pese a la magnitud de la amenaza, existe tiempo para revertir el daño mediante acciones urgentes y coordinadas a nivel mundial.
Kensington Palace abandera la lucha por la supervivencia de los mares
En una época en la que cada vez se consumen más recursos naturales, resulta primordial un plan de acción. Kensington Palace desea ser el abanderado que encabece un cambio drástico que ayude a preservar nuestro bien más preciado: la naturaleza.
La deforestación, la contaminación tanto terrestre como marítima, entre otras muchas causas están teniendo ya graves consecuencias en la naturaleza. En Reino Unido son muy conscientes de ello y han querido aprovechar el Foro de Economía Azul y Finanzas para dar mayor visibilidad al problema.

El hijo de Carlos invitó a los gobernantes, empresarios y organizaciones internacionales a “pensar en grande”, valorando la Economía Azul como motor de restauración económica y ecológica conjunta. El príncipe resaltó que el compromiso global de proteger un 30% de la tierra y los mares representa la mejor oportunidad para revertir de inmediatamente la degradación planetaria.
Sin embargo, advirtió que el “reloj está corriendo”, ya que la fecha límite se aproxima en 2030 y las protecciones actuales resultan claramente insuficientes. Por ello, Kensington Palace apremia a los líderes mundiales a que actúen de manera rápida: “Si salvamos el mar, salvamos nuestro mundo”, señaló.
Este discurso sirvió como un preludio crucial al inicio de la Conferencia de los Océanos de las Naciones Unidas en Niza. Aunque Guillermo no ha podido acudir a esta Conferencia, el compromiso de Kensington Palace por la protección de los océanos ha quedado demostrada.