Nicole Kimpel ha reaparecido tras semanas de incógnita en las que su ausencia pública había despertado numerosos rumores. La empresaria de origen alemán ha sido vista nuevamente en España, confirmando de forma inesperada su situación actual con Antonio Banderas. Y lo ha hecho con una frase sencilla pero concluyente: “Estamos de vacaciones”.
La pareja se ha dejado ver por Marbella, ciudad en la que residen desde hace años y donde actualmente disfrutan de unos días de desconexión. En medio de un clima de especulaciones sobre un posible distanciamiento, esta aparición conjunta ha despejado cualquier duda. La propia Nicole se ha encargado de subrayar que todo sigue en orden con el actor malagueño.
No han sido pocos los que habían notado su desaparición de la vida pública en los últimos meses. Desde que comenzaron las obras de la nueva mansión, él ha continuado con su agenda profesional, mientras ella se mantenía en un segundo plano. Esta discreción había dado pie a conjeturas que, ahora, parecen infundadas.
La declaración de Nicole ha sido breve, pero ha tenido un efecto contundente en el entorno mediático. A pesar de que se la intentó interrogar sobre otros temas, como la esperada boda de la hija de Banderas, Kimpel no quiso ofrecer más detalles. Con una sonrisa, insistió en que simplemente están descansando y que no hablaría más por el momento.
Antonio Baneras y Nicole Kimpel no se han separado
Mientras tanto, Antonio Banderas continúa supervisando las obras de su nuevo hogar en la Costa del Sol. La vivienda, cuya ubicación exacta se mantiene en secreto, será uno de los escenarios clave en esta nueva etapa personal del actor. Todo apunta a que el inmueble estará terminado antes del otoño, coincidiendo con un acontecimiento familiar de gran importancia.
Y es que la familia Banderas vive un momento especialmente significativo. Stella del Carmen, hija del actor y de la intérprete estadounidense Melanie Griffith, prepara su boda con su prometido, Alex Gruszynski. La joven se encuentra organizando el enlace, previsto para octubre de este año.
El evento se celebrará en España, aunque aún no ha trascendido la localización concreta. Los novios, que comparten una larga historia personal, se conocieron durante su infancia en el colegio Wagon Wheel School, en Los Ángeles. Años después, en agosto de 2024, decidieron dar el paso definitivo con una romántica petición de mano.
Desde el compromiso, tanto Stella como sus padres han mantenido un perfil bajo respecto a los preparativos. Aunque Antonio Banderas ha atendido a los medios en distintas ocasiones, siempre ha evitado hacer comentarios sobre la boda de su hija. La misma estrategia de discreción ha seguido Nicole, quien ha eludido las preguntas con educación y sin entrar en detalles.
En los últimos tiempos, la atención mediática se había centrado en la aparente distancia entre Nicole y el actor. La falta de imágenes conjuntas y la escasa actividad en redes sociales alimentaban el morbo. Sin embargo, su reciente escapada a Marbella ha sido interpretada como una respuesta implícita a todas esas habladurías.
La boda de Stella, hija de Antonio Banderas
No se trata solo de unas vacaciones. La pareja está demostrando, con hechos más que con palabras, que su vínculo permanece sólido. Aunque prefieren mantener su intimidad, este gesto ha sido suficiente para poner fin a las dudas.
Además, este viaje llega en un momento clave para ambos. Por un lado, Antonio se encuentra volcado en sus nuevos proyectos empresariales y en la casa que está construyendo. Por otro, Nicole ha optado por mantenerse al margen de la exposición pública, priorizando la calma antes del revuelo que pueda traer la boda.
La relación entre Stella y Alex es otro de los focos de interés en este entorno familiar. Aunque alejados de los medios, ambos han sido vistos en distintas ocasiones durante sus visitas a España. La familia entera parece volcada en que todo salga perfecto para el gran día.
Todavía no se sabe si Antonio ejercerá algún papel especial durante el enlace. Tampoco se ha confirmado si Nicole tendrá algún protagonismo en la ceremonia o si la pareja de novios optará por un formato reducido. Lo que sí parece claro es que todos desean que el evento se celebre con la máxima privacidad.
Por el momento, las pistas son escasas y las declaraciones, aún más. Lo que se ha hecho evidente con esta última aparición pública es que la familia está unida y compartiendo tiempo en común. Lejos de los rumores, el clima que se respira es de tranquilidad y cercanía.
La frase de Nicole, “estamos de vacaciones”, ha bastado para acallar los comentarios más insistentes. Lejos de dramatismos o comunicados formales, ha sido una respuesta natural y espontánea. Y, sobre todo, muy reveladora.