Montaje de fotos de primer plano de la infanta Sofía sonriente y, de fondo, una imagen del Palacio de la Zarzuela.

Una psicóloga descubre algo sobre la infanta Sofía y la Familia Real: ‘Es muy…’

Una experta analiza el cambio al que se enfrenta la infanta Sofía y las consecuencias que puede tener en su futuro

La infanta Sofía se enfrenta a una etapa llena de importantes cambios. Tras finalizar su bachillerato internacional, ahora se abre ante ella la posibilidad de ingresar en la universidad. Esto conlleva una gran repercusión que, según Lara Ferreiro, podría tener consecuencias.

“Es muy común”, sostiene la experta después de analizar cómo serán estos primeros meses en la vida de la infanta Sofía. Sobre todo, porque la personalidad de la infanta todavía está formándose y cualquier contratiempo podría cambiar las cosas.

La infanta Sofía sonríe mientras está de pie al aire libre con un fondo de árboles y luz natural.
La infanta Sofía comienza una vida plagada de grandes cambios | Casa Real

Sale a la luz la realidad de la infanta Sofía

La infanta Sofía se encuentra en un momento de cambios significativos que marcarán su futuro más inmediato en la Familia Real. A sus 18 años, ha dado claras muestras de poseer una personalidad propia, negándose a seguir los pasos militares de Leonor. En su lugar, opta por formarse en la universidad, pero esto no está exento de ciertas dificultades.

Así lo desvela la psicóloga Lara Ferreiro en Semana tras analizar cómo será el primer año universitario de la infanta. Según ha descubierto, este primer año universitario puede ser emocionalmente muy exigente y causar múltiples dificultades durante el proceso de adaptación inicial. La infanta Sofía afronta circunstancias especiales que se juntan a las propias de los primeros meses, lo que podría agravar las cosas.

De entre todas ellas, Ferreiro destaca el conocido como síndrome del burnout universitario. Lo que se manifiesta con agotamiento mental y emocional tras las  exigencias académicas sostenidas y presión institucional constante sobre la joven. “Es muy común que los primerizos sientan que en ámbito académico social no pueden llegar a todo y desarrollen miedo a quedarse fuera”, explica.

La Familia Real Española posando juntos en un ambiente festivo con decoraciones navideñas.
Sofía podría sufrir diferentes complicaciones en su primer año universitario | Instagram, @restaurantealbufera

En el caso de la infanta Sofía, al no poseer agenda oficial, la experta resalta que puede evitar “caer en esto”. No obstante, no le exime de vivir otras presiones que podrían poner en riesgo su estabilidad emocional. En este sentido, la psicóloga pone sobre la mesa la constante comparación con Leonor.

“Añade una presión extra que la lleva a sentirse segundona”, señala sobre la “crisis de identidad” que podría sufrir Sofía. Lo que se traduce en otro síndrome, en este caso el de la impostora. Lo que le haría sentir que su rendimiento académico debe estar a la altura de logros familiares previos extraordinarios.

Los nuevos retos a los que se enfrentará la infanta Sofía

El análisis de la experta no culmina ahí. Ferreiro también ha insistido en la necesidad que podría sentir la infanta Sofía por mantener la imagen perfecta que se espera de ella. Esta presión por querer dar siempre la talla está marcado por la necesidad de control y aprobación externa.

Ferreiro también habla sobre el “duelo migratorio”. Una fase emocional que implica lidiar con la adaptación a nuevos entornos sociales tras abandonar el internado gales de forma definitiva. Este proceso de adaptación puede durar varios meses y conlleva emociones como incertidumbre, ansiedad y miedo a lo desconocido, factores que requieren apoyo emocional constante.

Dos jóvenes sonrientes posando para una selfie con fondo azul.
La infanta vive bajo la comparación de Leonor | @CasaReal, Instagram

El hecho de que su formación universitaria pueda ser en el extranjero o en España aumenta la complejidad emocional de este periodo de transición vital. Otra dificultad señalada por la experta es la hipervigilancia emocional que la presión mediática puede activar, lo que puede derivar en fobia social.

Ferreiro afirma que las comparaciones constantes y las expectativas depositadas en ella pueden incitar un sentimiento de “desdibujamiento”. Es decir, como si no supiera realmente cuál es su lugar.

El primer año universitario representa para Sofía tanto una oportunidad de crecimiento como un reto emocional complejo, marcado por altos niveles de presión institucional. Si bien no se espera de ella el máximo nivel, sí existe una constante atención sobre sus logros.

Por ello, la experta concluye que, si la infanta es capaz de sobrellevar esta nueva etapa con autenticidad, será un ejemplo para las siguientes generaciones.