El rey Felipe da hoy uno de los pasos más importantes de su papel como jefe de Estado: regresa a Cataluña con lo que conlleva. El rey, junto a Letizia, asistirá a la celebración del milenario de la abadía de Montserrat, el emblema del pueblo catalán. Con su visita, Felipe espera restablecer los vínculos con la sociedad catalana, tan contraria a la monarquía durante años.
La elección de regresar a Cataluña por medio de Montserrat representa una estrategia clara de la Casa Real. La abadía es símbolo de unidad y tradición, capaz de tender puentes y el rey Felipe desea que le sirva de ayuda. No obstante, su presencia ya ha comenzado a tener consecuencias y se esperan movilizaciones contra la presencia de los reyes.

El rey Felipe causa revuelo en su último acto público
El rey Felipe comienza su agenda semanal con uno de los actos más delicados de su papel institucional. Hoy, al filo del mediodía, todos serán testigos del paso que ha decidido dar Felipe regresando de nuevo a Cataluña. Un paso que, además, culminará en la abadía de Montserrat, enclave con enorme significado para el pueblo catalán.
Su presencia no pasará desapercibida y ya ha generado un gran revuelo mediático. Y es que, desde que se impulsó la independencia de Cataluña, las relaciones entre Felipe y los dirigentes políticos han sido tensas. También con una parte de la sociedad que no ve en el rey la figura de un jefe de Estado.

Por este motivo, el paso que ha decidido dar regresando a Barcelona ya ha comenzado a tener consecuencias. Se esperan movilizaciones en contra de la visita del rey Felipe encabezadas por el grupo político Asamblea Nacional de Cataluña. Con la consigna “Que no ponga ni un pie”, desean presionar y visibilizar el rechazo que provoca en algunos la visita de Felipe.
La Coordinadora Antimonárquica de Girona y el Consell de la República también han emitido comunicados pidiendo al abad que impida la entrada de los reyes. Y es que para el pueblo catalán, Montserrat es “sagrada” y representa la lucha y los valores de todo una comunidad.
El rey Felipe muestra su admiración y cariño
Mientras parte del pueblo catalán trata de mantener al rey Felipe alejado de su historia, este trata de tener puentes. Aunque el referéndum por la independencia no le hizo sentirse cómodo, no ha dejado de regresar a Cataluña cuando ha tenido ocasión.
Ahora, repite experiencia en un intento de tender puentes y de intentar restaurar los lazos con la comunidad. Para ello, participará activamente en el milenario de la abadía de Montserrat como muestra directa de su carriño por la tradición e historia catalana.

Su discurso será enteramente en catalán, como ha venido haciendo desde siempre cuando ha acudido a actos oficiales en Cataluña. Una costumbre que también ha trasladado a su hija, la princesa Leonor, quien ha seguido los pasos de su padre como muestra de respeto.
Además, el evento se celebrará en la víspera de la festividad de San Juan, buscando resonancia en la tradición catalana y su cultura. Con todo ello, el rey Felipe espera que las consecuencias de su visita sean positivas. Sobre todo por su intento de conectar con una parte de Cataluña que busca normalizar relaciones institucionales sin perder su identidad.
Sea como fuere, lo evidente es que esta visita del rey Felipe marcará un antes y un después en su relación con Cataluña. Solo el tiempo dirá si su presencia en Montserrat y el respeto a su historia ayudan a estrechar lazos y restaurar relaciones. Por lo pronto, todo está listo para una jornada que se prevé emotiva y de alto interés para la sociedad catalana.