La historia personal de Rocío Carrasco sigue despertando un enorme interés. Su papel como madre y las dificultades que ha atravesado a lo largo de los años han sido objeto de numerosos titulares.
Con una trayectoria marcada por la exposición mediática, Rocío ha elegido en los últimos años abrir su corazón en primera persona. Sus testimonios ofrecen detalles hasta entonces desconocidos sobre su maternidad y los recuerdos ligados a la llegada de sus hijos. La sinceridad con la que se ha expresado ha impactado en la audiencia.
Recuerdos de la maternidad
Rocío Carrasco relató cómo fue el nacimiento de su hijo David y las complicaciones que acompañaron aquel momento tan delicado. Explicó que tuvo que trasladarse al hospital 12 de Octubre para permanecer junto a su pequeño. Durante varios días, se quedó en una silla frente a él, viviendo las horas con angustia e incertidumbre.
La presentadora confesó que aquella etapa estuvo marcada por un sentimiento de culpa y de miedo constante. Recordó cómo, incluso durante el embarazo, llegó a temer por la vida de su hijo: “Me metí en la ducha y vi el agua correr con sangre. Pensé que iba a perder al niño”, narró en uno de los episodios más duros.
La revelación más dura
En uno de los capítulos más comentados, Rocío se refirió al nacimiento de David y al sentimiento que le acompañó. En sus propias palabras, “Yo hubiera salido de aquella espiral de horror durante el embarazo, si a lo mejor habría sido diferente”. Sus palabras parecían apuntar a la compleja relación que mantenía en aquel tiempo con Antonio David Flores, una situación que influyó en su embarazo.
Explicó que durante años se culpó injustamente por las dificultades que atravesó su hijo, hasta comprender que no dependían de ella. Aquella etapa, dijo, dejó una huella imborrable en su forma de vivir la maternidad.
En su docuserie, la hija de Rocío Jurado también expresó que la relación actual con sus hijos no es la que ella deseaba. “Mis hijos tienen un vínculo fuerte, pero hoy por hoy no es el vínculo que yo les inculqué”, afirmó con tristeza. Para la presentadora, esa distancia ha sido uno de los mayores dolores de su vida.
El presente de una relación marcada por la distancia
Las declaraciones de Rocío Carrasco volvieron a tener eco tras la entrevista de su hija Rocío Flores en televisión. La joven aseguró que sigue queriendo a su madre, pero admitió sentirse destrozada por la falta de relación. Explicó que, aunque no espera nada, siempre estará dispuesta a retomar el vínculo si su madre lo desea.
El distanciamiento entre madre e hijos ha sido motivo de debate constante en los medios. Rocío Flores relató que, en las ocasiones en las que coincidieron, apenas obtuvo un saludo distante como respuesta. Sus palabras evidencian el vacío que existe en la comunicación entre ambas partes.
Por el momento, Rocío Carrasco ha optado por guardar silencio tras esas declaraciones. Centrada en sus compromisos televisivos, continúa alejada de sus hijos mientras ellos siguen construyendo sus vidas. La incertidumbre sobre un posible acercamiento sigue estando presente en la opinión pública.