Ha sido uno de los temas más comentados de la semana. El pasado 30 de junio, Cayetano Rivera fue detenido tras protagonizar un presunto altercado con dos agentes de policía. Ahora su ex, Blanca Romero, y su hija, Lucía Rivera, han tomado una gran decisión tras las últimas polémicas familiares.
El incidente ha tenido lugar en una conocida hamburguesería de Madrid. Según se ha publicado, el torero ha pasado varias horas en la comisaría acusado de resistencia y desobediencia a la autoridad. Más tarde, ha sido puesto en libertad.

Desde entonces, la polémica no ha dejado de crecer y Cayetano Rivera ha emitido dos comunicados. En ellos, ha asegurado que se están difundiendo "versiones infundadas sobre los hechos". También ha recalcado que en ningún momento "ha amenazado ni agredido a nadie".
Blanca Romero y Lucía Rivera viajan durante las últimas polémicas familiares
Las reacciones no se han hecho esperar y el entorno del torero ha estado en el punto de mira. Primero ha sido Eva González, su exmujer, quien ha hablado brevemente del tema y lo hizo con mucha cautela. La presentadora señaló que no tiene ninguna opinión al respecto y añadió que prefiere centrarse en su trabajo y en el cuidado de su hijo.
Ahora, el foco ha girado hacia Blanca Romero y su hija Lucía Rivera. Madre e hija han sido tajantes: Han decidido mantenerse al margen del escándalo familiar. No han hecho declaraciones y tampoco han publicado nada al respecto en sus redes, han optado por el silencio.

La decisión ha sido firme: Blanca y Lucía han apostado por priorizar sus vidas profesionales. Mientras Lucía ha viajado a Marbella para asistir a un evento de Valentino como modelo e influencer, Blanca ha regresado a Madrid tras pasar unos días en Toulouse. Donde la modelo ha participado en una campaña publicitaria.
Ambas han dejado claro su posicionamiento: centrarse en lo verdaderamente importante. No han querido alimentar la polémica y tampoco se han posicionado públicamente a favor o en contra de Cayetano. Su decisión ha sido mantenerse al margen y no hay vuelta atrás.
Lucía Rivera y Blanca Romero se han centrado en sus carreras profesionales
Esta actitud ha sido interpretada por muchos como una forma elegante de apoyar a distancia. Han preferido guardar silencio en lugar de avivar aún más la tormenta mediática. Blanca Romero y Lucía Rivera han marcado una línea clara.

No hablarán del tema. No responderán a las preguntas. Se han protegido mutuamente y han optado por avanzar.
La familia ha vivido días intensos, pero ellas han tomado su camino. Un camino que pasa por la discreción y el foco en su presente laboral.