La Seguridad Social en los Estados Unidos tiene un SSI (Ingreso Suplementario del Seguro Social) que está disponible para ciertas personas con incapacidad. Este mensaje es clave: muchas familias no saben que pueden recibir este beneficio.
La SSA dice que un niño puede recibir SSI si cumple dos condiciones. Si tiene una discapacidad médica que produce limitaciones severas y funcionales, y su familia cumple ciertos requisitos financieros.
Comunicado de la SSA de Estados Unidos: estos niños pueden cobrar el SSI
La discapacidad debe haber durado o esperarse que dure al menos 12 meses o causar la muerte. También la familia debe tener ingresos y recursos bajos, y en menor de 18 años se cuentan incluso los ingresos y activos de los padres que viven en el mismo hogar.

La Seguridad de Ingreso Suplementario (SSI) no requiere historial laboral, solo ciudadanía o residencia en EE. UU., y cumplir edad o discapacidad. Los niños menores de 18 con una condición médica grave pueden ser elegibles, especialmente si tienen enfermedades como síndrome de Down, parálisis cerebral, pérdida de la vista o audición, cáncer u otras discapacidades graves.
Es obligatorio cumplir unos requisitos: la SSA lo deja claro
Las condiciones para obtener este derecho son dos matrices: condición médica y situación financiera. La SSA revisa si la discapacidad es suficientemente severa, usando informes médicos, escolares y cualquier prueba aceptable. Un fallo clave en 1990, Zebley, amplió la definición, pidiendo analizar cómo impacta la enfermedad en las actividades del niño, no solo diagnósticos médicos.
Si cumples esos requisitos, puedes comenzar el trámite llenando primero un Informe de discapacidad infantil en línea (formulario SSA‑3820). Luego la SSA contacta por teléfono en 3‑5 días hábiles para una cita y continuar la solicitud por teléfono o en una oficina local. También puedes llamar al número nacional 1‑800‑772‑1213 o visitar una oficina física de la SSA para pedir ayuda.

Recibir SSI puede dar acceso a Medicaid, SNAP u otros servicios públicos
Este beneficio es esencial: otorga pagos mensuales para cubrir necesidades básicas como comida, vivienda, ropa o medicinas. En muchos estados, además del monto federal, hay un suplemento estatal que aumenta la cantidad total que recibe la familia. Además, recibir SSI automáticamente puede dar acceso a Medicaid, SNAP u otros servicios públicos según la ley federal y estatal.
Es importante estar alerta: la advertencia de la SSA es clara: si hay dudas sobre elegibilidad, siempre debes contactar a la SSA para no perder opciones. No dejes pasar la oportunidad si crees que tu hijo reúne las condiciones médicas y tu familia tiene ingresos limitados.