El Gobierno de Estados Unidos, la Seguridad Social (SSA) y el IRS, ha puesto su atención en un tema que muchos pasan por alto. Aunque parezca algo menor, usar ciertos coches para asuntos personales puede convertirse en un gran problema.
Y es que detrás de lo que parece una simple comodidad, se esconde una posible evasión de impuestos que las autoridades están decididas a controlar con firmeza. Cada vez es más común que las empresas en Estados Unidos pongan a disposición de sus empleados vehículos tipo SUV para los viajes de trabajo.
La SSA y el IRS te controlan más que nunca: cuidado con el uso del SUV
Sin embargo, el IRS ha detectado que muchos usan estos autos también para fines personales. Llevar a los hijos a la escuela, hacer compras, escapadas de fin de semana o incluso vacaciones. Todo eso, si no se declara correctamente, puede ser considerado uso indebido y el Gobierno está vigilando de cerca.

El IRS no toma este asunto a la ligera. Según la normativa, si un vehículo de empresa se usa fuera del horario laboral, esos trayectos deben declararse como ingresos adicionales. Si no lo haces, te enfrentas a multas importantes, auditorías y hasta sanciones más graves por evasión de impuestos.
Si el IRS detecta esta irregularidad, ponte en lo peor
El hecho de que se trate de un SUV no pasa desapercibido, este tipo de vehículos suelen tener un alto coste y llaman mucho más la atención en los controles. La Seguridad Social también está interesada en este control porque los ingresos no declarados afectan a las aportaciones que se realizan al sistema.
Es decir, si el IRS detecta que usas el coche de empresa para asuntos personales sin declararlo, también puede repercutir en tu historial contributivo y, a largo plazo, en tu pensión o tus beneficios sociales.

Se trata de cumplir la ley: tómatelo en serio
Por eso, es muy importante prestar atención y si tienes un SUV de empresa, debes llevar un registro detallado de cada viaje. Distinguir claramente entre los desplazamientos de trabajo y los personales es clave. De lo contrario, podrías acabar en el punto de mira del Gobierno, el IRS y la Seguridad Social.
No se trata solo de evitar una multa o una auditoría. Se trata de cumplir la ley y no poner en riesgo tu futuro financiero por un descuido. Las autoridades de Estados Unidos están siendo muy claras: hay vigilancia, y el uso de vehículos de empresa para temas personales está bajo el radar, así que cuidado.