La recta final de agosto vendrá marcada por un cambio brusco en la situación meteorológica en Cataluña y en buena parte del país. Tras varias semanas dominadas por el calor intenso y estable, llegan días de inestabilidad y descensos térmicos notables. Esta situación será la encargada de poner fin al ambiente sofocante que ha caracterizado el verano.
Según el meteorólogo Eloi Cordomí, los restos del ex huracán Erin alcanzarán la península ibérica durante la segunda mitad de esta semana y serán los responsables de un tiempo más variable. La jornada más complicada en Cataluña se vivirá el miércoles por la tarde, cuando se esperan tormentas fuertes. También una bajada de las temperaturas que anunciarán la proximidad del otoño.
Un martes de verano
El martes será una jornada de transición. Predominarán los cielos soleados en buena parte del territorio, aunque no se descartan algunas nubes en la costa y en el interior. Pese a esas formaciones nubosas, el sol acabará imponiéndose con fuerza y se vivirá un día plenamente veraniego.
Las temperaturas repuntarán de forma generalizada y se alcanzarán los 30 grados en toda Cataluña. En el interior oeste, concretamente en la provincia de Lérida, se esperan valores que podrían rozar los 36 grados. Consolidando así el martes como uno de los días más cálidos de la semana.
Será a partir del miércoles por la tarde cuando la situación cambie radicalmente. La entrada de los restos de Erin traerá consigo un incremento de la inestabilidad, especialmente en el noreste peninsular. En Cataluña se prevén tormentas localmente fuertes, acompañadas de rachas de viento y posible granizo.
Se tratará de un giro brusco en menos de 24 horas, lo que podría sorprender a muchos ciudadanos tras la calma del martes. El jueves la inestabilidad se extenderá a buena parte del país. Las precipitaciones más intensas se esperan en la mitad norte, donde las tormentas podrán ser persistentes.
La bajada de temperaturas será acusada y generalizada, marcando un contraste con respecto a los valores registrados a inicios de semana. Este descenso térmico, según los modelos meteorológicos, se mantendrá también durante el viernes. De cara al sábado y el domingo, la situación tenderá a mejorar, aunque todavía con restos de inestabilidad en algunos puntos.
Un fin de semana más tranquilo, pero por debajo de la media
El sol volverá a ganar protagonismo, pero las temperaturas se mantendrán a raya e incluso por debajo de lo habitual para estas fechas. Será un alivio para quienes estaban agotados del calor africano que ha marcado gran parte del verano. Eloi Cordomí también adelanta que, además de este episodio, se prevé la llegada de dos vaguadas de aire frío que acentuarán el alivio térmico y la inestabilidad atmosférica.
La primera alcanzará la Península el 28 de agosto, mientras que la segunda lo hará el 1 de septiembre. Ambas favorecerán un ambiente más fresco y húmedo, rompiendo la dinámica cálida de semanas anteriores. Tras un martes veraniego y soleado, Cataluña afrontará a partir del miércoles un escenario marcado por tormentas intensas y un refresco general.