Montaje de fotos de primer plano de Donald Trump y Camila Parker.

Aviso muy urgente sobre la reina Camila tras lo sucedido con Donald Trump en América

La reina Camila viaja hasta Canadá después de que Donald Trump expresara su deseo de anexionar este país a EE. UU.

La reina Camila se ha convertido en el centro de todas las miradas gracias a su última visita oficial a Canadá junto a Carlos III. Un viaje que se ha producido días después de las amenazas de anexión expresadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El pasado lunes, 26 de mayo, el matrimonio real llegó a Ottawa en su primera visita oficial a Canadá como monarcas. Durante su estancia, los soberanos británicos han participado en varios actos, entre ellos, en la inauguración de la 45ª legislatura del Parlamento canadiense.

Montaje de fotos de plano medio de Donald Trump y la reina Camila, ambos con rostro neutro.
La reina Camila viaja a Canadá tras las amenazas de anexión de Donald Trump | Europa Press, es.catalunyadiari.com

Tal y como ha trascendido, la reina Camila y Carlos III aterrizaron a las 13:15 hora local en el aeropuerto de la capital canadiense. Y lo hicieron a bordo de un Airbus CC-330 Husky de la Fuerza Aérea canadiense.

Sin embargo, nada más bajar del avión, la reina Camila logró convertirse en el centro de todas las miradas. Y todo gracias a su increíble broche de brillantes y diamantes en forma de hoja de arce, joya que simboliza el emblema nacional de Canadá.

El rey Carlos III y la reina consorte Camila sonríen mientras están de pie al aire libre bajo un cielo azul
El broche de la reina Camila no ha pasado desapercibido | Instagram, @theroyalfamily

Según ha trascendido, originalmente, fue un regalo que el rey Jorge VI le hizo a su esposa, la reina Isabel, abuela de Carlos III, con motivo de su primer viaje a Canadá en 1939.

Esta joya tiene un gran valor histórico, ya que fue usada en numerosas ocasiones por la reina Isabel II durante sus visitas al país. Además, la reina Camila también la llevó en su primera visita oficial a Canadá cuando aún era duquesa de Cornwall.

La reina Camila y Carlos III visitan Canadá tras las amenazas de anexión de Donald Trump

En el aeropuerto, la reina Camila y su marido, Carlos III, fueron recibidos por la gobernadora general de Canadá, Mary Simon, y por el primer ministro, Mark Carney. Esta cálida recepción marcó el inicio oficial de su visita y simboliza el fortalecimiento de los lazos históricos entre dicho país y la monarquía británica.

El rey Carlos III y la reina consorte Camila elegantemente vestidos caminan por una alfombra roja mientras soldados con uniformes rojos y cascos plateados forman una guardia de honor a su alrededor
La reina Camila y Carlos III tuvieron un gran recibimiento | Instagram, @theroyalfamily

A la ceremonia de llegada también asistieron los líderes de los tres principales grupos indígenas del país. Entre ellos estuvieron Cindy Woodhouse Nepinak, de la Asamblea de Primeras Naciones; Natan Obed, representante inuit; y Victoria Pruden, presidenta de los métis.

Ese mismo día, la reina Camila y Carlos III participaron en la tradicional ceremonia de plantación de un árbol en Rideau Hall, residencia oficial de la gobernadora general. El árbol elegido fue un carpe americano, el quinto plantado por el monarca en ese lugar.

El rey Carlos III de espaldas con una pala junto a un árbol y él mismo, con Camila, posando junto a una mesa en un interior elegante, con la imagen dividida en dos partes
La reina Camila y Carlos III han participado en varios actos durante su visita | Instagram, @theroyalfamily

Además, también se celebró la ceremonia de jura de la reina Camila como integrante del Consejo Privado para Canadá. Este cuerpo asesora al monarca en asuntos de Estado y constitucionales.

Finalmente, el pasado martes, el rey Carlos III inauguró la 45ª legislatura del Parlamento canadiense. Esta ha sido la tercera vez que un monarca británico lee el Discurso del Trono en Canadá, las anteriores fueron en 1957 y 1977, ambas protagonizadas por la reina Isabel II.

No hay duda de que la participación del rey en esta ceremonia responde a una solicitud directa del primer ministro Mark Carney. Y es que el objetivo es subrayar los lazos constitucionales entre Canadá y la monarquía británica.

Un gesto que ahora cobra una especial importancia, teniendo en cuenta el contexto de gran tensión internacional y amenazas de anexión por parte del presidente estadounidense Donald Trump.