La Casa Real de Dinamarca ha dejado a más de uno sin palabras con el último comunicado que ha emitido sobre el rey Federico. En él, su equipo de comunicación ha dejado al descubierto cuál es la estrategia comunicativa que el monarca va a seguir a partir de ahora.
No hay duda de que la relación entre Federico de Dinamarca y la prensa local se ha tensado notablemente en los últimos días. Y todo a raíz de la decisión que ha tomado el monarca y que, según parece, no ha sido bien recibida por los medios del país ni por diversos expertos.

Desde su ascenso al trono, tras la abdicación de la reina Margarita II, el rey Federico ha intentado mantenerse alejado de los escándalos. Sin embargo, parece que sus esfuerzos no han dado frutos, ya que continúa envuelto en polémicas que lo colocan bajo el escrutinio público.
Por eso, ante este clima de tensión creciente, la Casa Real de Dinamarca se ha visto obligada a intervenir públicamente. Y lo ha hecho a través de su directora de comunicación, que por primera vez desde su nombramiento ha hablado para dar explicaciones.

Nina Munch-Perrin, mano derecha del rey Federico en todo lo relacionado con la estrategia comunicativa, rompió su silencio hace unos días en el programa Presselogen.
Durante su intervención en este espacio de TV2, la jefa de comunicación del monarca emitió un importante comunicado. En él, informó sobre la “nueva realidad a la que los ciudadanos y, sobre todo, los medios de comunicación deben acostumbrarse”.
La jefa de comunicación de la Casa Real de Dinamarca emite un inesperado comunicado del rey Federico
El motivo de esta inesperada intervención televisiva está directamente relacionado con la controversia generada por la publicación de las fotografías y el vídeo oficiales del príncipe heredero Christian.
Dicho contenido, divulgado hace unos días, acompañaba la noticia de que el joven continuará su formación en las Fuerzas Armadas. La publicación fue interpretada como una ruptura con los métodos tradicionales de la monarquía.

Por su parte, el medio danés Ekstra Bladet informó que este material provocó fuertes críticas por parte de expertos como Thomas Larsen, uno de los analistas más influyentes del país.
Según Larsen y otros representantes de la prensa, la Casa Real de Dinamarca ha limitado la libertad editorial sobre los contenidos que se difunden. Además, alegan que no se otorgan “plenos derechos de edición” ni se permite que los medios participen en una “conversación pública”.
La presión mediática ha sido tal que la mano derecha del rey Federico ha tenido que explicar a través de un comunicado que la Casa Real está atravesando un cambio profundo:
“Tenemos una nueva pareja real y se hará de manera diferente. Pienso que esa puede ser una actitud difícil de digerir para algunos de los medios establecidos porque las cosas van a tomar un rumbo diferente.[…]Claramente, los reyes quieren comunicarse de una manera diferente a como lo han hecho hasta ahora”.