Meghan Markle y Angelina Jolie vuelven a estar en el centro de todas las miradas por un motivo inesperado. Esta vez no se trata de un estreno, una declaración polémica o un movimiento estratégico, sino de un asunto mucho más delicado. Se trata de la implicación indirecta de ambas en un problema que afecta al corazón de la industria del lujo.
Ambas figuras públicas, íconos globales y defensoras de causas sociales, se han visto señaladas por su relación con una de las firmas más exclusivas y discretas del planeta. Una firma que ha sido puesta bajo investigación por posibles irregularidades que podrían cambiar para siempre la percepción que tenemos del lujo ético. ¿Qué ha ocurrido realmente?

Saltan las alarmas por Meghan Markle y Angelina Jolie tras el problema de una marca que utilizan
En el universo de la moda de lujo, donde el estilo no necesita logotipos y la sofisticación se expresa con tejidos nobles, el nombre de Loro Piana brilla con fuerza. Durante años, esta firma italiana ha sido considerada la cúspide de la elegancia atemporal, vestida por quienes prefieren hablar con presencia antes que con ostentación.
La visten desde miembros de la realeza hasta líderes tecnológicos como Jeff Bezos, pasando por figuras como Jennifer Lawrence, Gisele Bündchen o Steve Jobs. Loro Piana se ha consolidado como símbolo de discreción y exclusividad.
Entre sus clientas más visibles destacan Meghan Markle y Angelina Jolie, dos mujeres que, con estilos muy distintos, han adoptado prendas de la firma como parte de su armario habitual. Pero todo cambió esta semana.

Una investigación abierta por el Tribunal de Milán ha puesto a la marca en el centro de una tormenta mediática sin precedentes. La causa: supuestos casos de explotación laboral en su cadena de suministro, mediante talleres no autorizados y condiciones que vulneran las leyes italianas y los valores éticos que la firma defiende.
Loro Piana es investigada por talleres no autorizados en Italia
Uno de los aspectos más impactantes ha sido la revelación de que algunas prendas, que se venden hasta por 3.000 euros, podrían haberse fabricado en talleres clandestinos por apenas 100 euros.
La marca ha negado rotundamente estos datos, señalando que no reflejan sus costes reales, que incluyen materias primas únicas y procesos artesanales complejos. Sin embargo, la indignación ya se ha extendido.
La empresa asegura que rompió relaciones con dicho proveedor en menos de 24 horas tras descubrir la situación, el pasado 20 de mayo. Pese a esta reacción inmediata, la justicia italiana ha decidido actuar con firmeza.
El Tribunal de Milán ha ordenado la supervisión judicial de la 'maison', una medida reservada solo para casos graves en los que se presume una carencia de control interno eficaz. Esta decisión no solo afecta la imagen de la firma, sino también a quienes se han vinculado con ella públicamente, como Meghan y Angelina.
Un problema que ha salpicado a Meghan Markle y Angelina Jolie
Aunque ni Meghan Markle ni Angelina Jolie están involucradas directamente en los hechos, la noticia ha encendido todas las alarmas. Su relación con la marca, ya sea mediante estilismos en actos oficiales o sesiones fotográficas, las coloca, sin quererlo, bajo el foco de una polémica que cuestiona los principios del lujo.
El daño reputacional, en estos casos, va más allá de los balances económicos. La percepción pública es ahora el campo de batalla, y figuras como Meghan Markle o Angelina Jolie se ven cuestionadas por su vínculo con una marca con una ética en duda.

¿Pueden seguir representando ciertos valores si apoyan a firmas implicadas en estas prácticas? La pregunta ya circula en redes sociales y medios internacionales. Y con ella, una reflexión más profunda sobre el verdadero coste del lujo.
Es indudable que la polémica en torno a Loro Piana ha salpicado a Meghan Markle y Angelina Jolie, dos referentes globales con una imagen construida sobre valores éticos. Aunque no estén directamente implicadas, su vinculación con la firma ha reabierto el debate sobre la responsabilidad de las celebridades en una industria tan importante como la moda.