Dos personas posando juntas, una de ellas sonriendo y la otra con expresión seria, en un entorno al aire libre.

Máxima de Holanda y el rey Guillermo admiten los rumores: la decisión es definitiva

El pasado fin de semana Máxima de Holanda y el rey Guillermo confirmaron lo que muchos se imaginaban ante el nuevo Papa

Máxima de Holanda y el rey Guillermo asistieron el pasado fin de semana al acto inaugural del pontificado del nuevo Papa. Allí, la pareja real de los Países Bajos confirmó los rumores: Máxima, a pesar de ser católica, no ostenta el ‘privilegio del blanco’. La decisión que otorga este derecho es concedida por el papa y en el caso de la reina Máxima esta es definitiva: nunca lo obtendrá.

El motivo principal se encuentra en que su marido, el rey Guillermo, es protestante, por lo que Holanda no se considera una monarquía completamente católica. Por esta razón, en la misa inaugural, la reina Máxima vistió de riguroso negro, marcando la diferencia con otras reinas europeas.

Dos personas bien vestidas sonríen mientras miran hacia la cámara.
Los reyes de los Países Bajos acapararon todas las miradas | Europa Press

Máxima de Holanda y el rey Guillermo protagonizan una última hora

El pasado fin de semana, el papa León XIV ofreció su misa inaugural ante un gran número de representantes internacionales de todo el mundo. Entre ellos se encontraba Máxima de Holanda y el rey Guillermo como representantes de la Casa Real de los Países Bajos.

La visita de la reina Máxima al Vaticano generó muchas preguntas entre los observadores de la realeza y los amantes del protocolo vaticano tradicional. Y es que ella y el rey Guillermo confirmaron con su presencia los rumores: Máxima no ostenta el ‘privilegio del blanco’. A pesar de profesar la fe católica desde hace ya más de dos décadas, vistió de riguroso negro.

El motivo detrás de esta decisión no es casual, sino que responde a la fe que profesa su marido, el rey Guillermo, de tendencia protestante. El ‘privilegio del blanco’ está reservado únicamente para reinas católicas de casas reales que han tenido una conexión histórica directa con el papado. Dado que la Casa Real holandesa tiene raíces protestantes, Máxima no figura entre las mujeres autorizadas para vestir de blanco ante el Papa.

Por ello fue de las pocas que lució de negro en la misa inauguran de León XIV, diferenciándose de otras reinas europeas. En este sentido, solo cinco reinas ostentan el ‘privilegio del blanco’ y este fin de semana hicieron uso de él. Entre ellas, la reina Letizia, quien también lució una mantilla.

El rey Guillermo impide que Máxima de Holanda obtenga el ‘privilegio del blanco’

Durante la misa inaugural del papa León XIV, la reina Máxima de Holanda fue de las pocas que asistió vestida de negro, siguiendo el protocolo. Aunque es católica practicante, no pertenece a la élite real que goza del privilegio exclusivo de vestir de blanco ante el pontífice. Esto demuestra que este privilegio no es religioso, sino dinástico y político en esencia.

Máxima de Holanda, aunque nacida en Argentina y convertida al catolicismo, es esposa de un rey protestante, lo cual limita su acceso a este privilegio. Por lo tanto, son los orígenes religiosos del rey Guillermo los que impiden que Máxima obtenga ese derecho.

Un grupo de personas vestidas de manera formal se encuentra reunido al aire libre, algunas de ellas lucen trajes oscuros y una mujer lleva un velo negro sobre la cabeza.
A pesar de ser católica, Máxima no puede vestir de blanco ante el Papa | Europa Press

La Casa de Orange-Nassau es de tradición protestante, y por eso su reina consorte no forma parte del selecto grupo autorizado. La decisión por parte de la Santa Sede es irrevocable y la reina neerlandesa jamás podrá vestir de blanco ante el Papa. Por tanto, su atuendo negro, acompañado de velo, demuestra respeto por la liturgia católica y la jerarquía vaticana.

Actualmente, solo unas pocas mujeres del mundo tienen derecho a vestirse de blanco frente al Papa durante ceremonias religiosas en el Vaticano. Entre ellas figuran la reina Sofía y Letizia, ambas por pertenecer a la dinastía Borbón.

Nuestra familia real ha mantenido lazos estrechos con la Iglesia católica a lo largo de los siglos, lo cual respalda su acceso al privilegio. Otras reinas que también pueden vestir de blanco ante el Papa son las de Bélgica y Luxemburgo, todas provenientes de casas católicas tradicionales.

Por ello, aunque Máxima sea personalmente católica y devota, su vínculo con una monarquía protestante le impide acogerse al derecho del vestido blanco.