En un momento especialmente delicado para la monarquía británica, la tensión vuelve a instalarse entre los muros del Palacio de Buckingham. Esta vez, el desencadenante ha sido una nueva entrevista del príncipe Harry, concedida a la BBC.
En ella, el joven arremete contra las decisiones que afectan a su seguridad personal en el Reino Unido. Además, lanza indirectas que han generado un profundo malestar en su padre, el rey Carlos III.
El distanciamiento entre ambos parece haberse profundizado una vez más. Todo esto en un escenario en el que la enfermedad de Carlos III añade aún más dramatismo al conflicto familiar.

El nuevo golpe a Carlos III que pone a la familia real británica en alerta
El duque de Sussex se mostró especialmente crítico con el hecho de que no se le haya restituido su escolta policial oficial en sus visitas al Reino Unido. Aunque este tema se encuentra bajo competencia del Gobierno británico, Harry insinúa que su padre podría haber intervenido.
Estas afirmaciones no han sido bien recibidas por Carlos III. Así lo ha informado The Sun citando a fuentes del entorno real. De esta manera, el hijo de Isabel II se siente "perturbado" y "frustrado" ante las acusaciones.
"El rey siempre ha considerado que este era un asunto que su Gobierno y sus tribunales debían resolver. Intervenir de cualquier forma sería constitucionalmente inapropiado", aseguran dichas fuentes.

Carlos III estaría muy molesto con el príncipe Harry
La incomodidad de Carlos no se limita únicamente al plano institucional. Lo que verdaderamente le ha dolido, según las mismas fuentes cercanas al Palacio, es que su hijo haya ignorado un principio que él considera sagrado.
"Lo que lo ha frustrado y perturbado a nivel más personal es que el duque no haya respetado este principio. Además de que sus partidarios sugieran que a su padre no le importa su familia, o que debería intervenir, chasquear los dedos y exigir una forma de protección".

A pesar del tono crítico de sus declaraciones, Harry asegura que desea reconciliarse con su padre, aunque admite que no mantienen contacto. "No sé cuánto tiempo le queda", confiesa, en referencia al cáncer que padece su padre.
Mientras Carlos III continúa enfrentando desafíos personales y de Estado, el distanciamiento con Harry se convierte en un asunto cada vez más visible y delicado. A pesar de los llamamientos a una posible reconciliación, el escenario actual parece más inclinado al desencuentro.