Una vez más, la reina Máxima ha vuelto a dejar sin palabras a los habitantes de Holanda con la última decisión personal que ha tomado. Y es que no se lo ha pensado dos veces a la hora de rescatar de su armario uno de sus vestidos favoritos, pieza que, año tras año, luce públicamente.
No hay duda de que este martes, 17 de junio, ha sido un día muy significativo para la realeza europea. Sin embargo, y aunque las correspondientes apariciones de Kate Middleton y la reina Letizia no han pasado desapercibidas, ha sido la reina Máxima la que ha conseguido acaparar todas las miradas.

Hace unas horas, la soberana ha viajado hasta La Haya para cumplir con una cita muy importante. Todo ello por su rol como presidenta honoraria de la iniciativa Más Música en el Aula.
Allí, la reina Máxima ha firmado un nuevo acuerdo de Educación Musical en el Conservatorio Real, reforzando así su apoyo a la cultura y a la enseñanza artística.

No obstante, y a pesar de la gran relevancia de esta cita, todos los ojos han estado puestos en el increíble vestido pintado a mano de Máxima. Pieza que cada año saca de su armario para lucir ante el resto de ciudadanos.
La reina Máxima deja sin palabras a los habitantes de Holanda con el estilismo que ha escogido para la ocasión
Para esta jornada, la reina Máxima ha apostado por un vestido en piqué de seda azul oscuro, sin mangas, con la cintura marcada y una falda trapecio, firmado por Natan.
Dicha prenda incluye un detalle curioso: sus motivos de cachemir blancos de estilo pañuelo han sido pintados a mano con plantillas y pintura textil. Un acabado artesanal que, sin duda, refuerza el carácter único del diseño.

Tal y como ha trascendido, la reina Máxima ha lucido este vestido en cuatro ocasiones desde 2022. La primera fue durante los Appeltjes Van Oranje Awards, el 12 de mayo de ese año. Después lo reutilizó el 7 de febrero de 2023 y el 29 de agosto de 2024, demostrando su predilección por esta pieza.
Teniendo en cuenta estas fechas, se puede apreciar que, además de ponérselo una vez al año, la mujer del rey Guillermo lo ha lucido en todas las estaciones, menos en otoño.
Se trata de una prenda personalizada, ya que inicialmente fue diseñada como un conjunto de top largo con pantalón ancho. Sin embargo, la reina Máxima lo transformó en un vestido totalmente exclusivo, decisión que resalta su estilo personal y su capacidad para adaptar la moda a su gusto.
Finalmente, la monarca ha completado su look con un cárdigan de punto blanco sobre los hombros y un clutch de piel azul. En los pies, ha llevado unas sandalias de tiras con tacón fino. Y como toque final, ha apostado por unos pendientes largos con cuentas.