Citibank recibía recientemente un fuerte revés que ha dado la vuelta al sector financiero en Estados Unidos. Un nuevo golpe legal obligará al gigante bancario a abrir la cartera. Aunque aún no se ha producido ningún juicio, la entidad ya ha tenido que llegar a un acuerdo millonario para cerrar una demanda que ha generado mucha polémica.
¿La razón? Llamadas no autorizadas que acabaron en los teléfonos equivocados. Todo comenzó con una denuncia colectiva que acusaba a Citibank de realizar llamadas automáticas y grabadas utilizando sistemas de voz artificial. El problema es que muchos de los números marcados no pertenecían a sus clientes.
Aun así, se enviaban mensajes sobre supuestos saldos vencidos de tarjetas de crédito. Lo que provocó confusión, molestias y, finalmente, un conflicto legal serio.

Citibank tendrá que indemnizar
Tras varios años de proceso, Citibank ha decidido no llegar hasta el juicio y ha optado por alcanzar un acuerdo legal por valor de 29,5 millones de dólares. Como parte de ese acuerdo, la entidad compensará a las personas afectadas con pagos que podrían llegar hasta los 850 dólares por persona.
Este pago no es automático ni generalizado. Para recibirlo, es necesario cumplir con una serie de condiciones. La primera, y más importante: no haber sido nunca cliente de Citibank.
Es decir, solo pueden optar al dinero quienes hayan recibido llamadas automáticas del banco sin tener ninguna relación con la entidad. Además, es necesario haber recibido al menos cinco llamadas de este tipo entre el 15 de agosto de 2014 y el 31 de julio de 2024. Estas llamadas debían ser sobre supuestos problemas con tarjetas de crédito, como saldos impagados, y fueron realizadas sin consentimiento previo.
Los reclamantes deben presentar pruebas de que esto ocurrió. Ya sean registros telefónicos, capturas de pantalla u otra documentación que valide su historia.

Citibank no ha reconocido oficialmente que haya cometido una infracción. Pero al aceptar este acuerdo evita un juicio que podría haber resultado más costoso en términos económicos y de reputación. Esta decisión forma parte de un intento por cerrar el caso rápidamente y pasar página.
La ley que se ha visto vulnerada, según la demanda, es la Ley de Protección al Consumidor Telefónico (TCPA). Regula estrictamente cómo y a quién se pueden realizar llamadas de tipo comercial o informativo con tecnología automatizada.
El problema al que se enfrentan los bancos
Este caso pone de relieve los desafíos legales que siguen enfrentando los bancos americanos cuando emplean sistemas automatizados. Sin verificar correctamente los datos de contacto. También es una advertencia clara a otras entidades financieras sobre las consecuencias de este tipo de prácticas.
Con este acuerdo, Citibank demuestra que incluso los grandes bancos no están exentos de tener que rendir cuentas. Para los afectados, la noticia es buena: podrán recibir una compensación económica sin necesidad de pasar por largos juicios. Para la entidad, sin embargo, es un aviso más de que rascarse el bolsillo puede ser la única salida cuando se cometen errores en la era digital.