Charlene de Mónaco apareció en la ceremonia de clausura del Festival de Televisión de Montecarlo del brazo del príncipe Alberto. El evento fue el momento idóneo para que la Casa Real de Mónaco confirmara el rumor que apunta a lo perfecta que siempre luce Charlene. El vestido de un azul sofisticado recordó su pasado deportivo y homenajeaba ligeramente su carrera como nadadora profesional durante años de dedicación.
Además, el estilismo también sirvió para homenajear el motivo que le llevó hasta su cita televisiva. En el escenario, Charlene de Mónaco galardonó a la actriz, directora y productora Robin Wright con el premio la Ninfa de Cristal.

Charlene de Mónaco confirma los rumores en su última aparición pública
Charlene de Mónaco ha experimentado un cambio radical que no ha escapado a los ojos de los medios internacionales. De un tiempo a esta parte, la mujer del príncipe Alberto se muestra en los actos mucho más sociable y alegre que de costumbre. Por no hablar de que siempre luce perfectamente vestida a los eventos oficiales.
Precisamente este es el rumor que la Casa Real de Mónaco confirmó en la última aparición de Charlene. El Principado se vistió de gala para la clausura del Festival de Televisión de Montecarlo que congregó a grandes rostros del mundo audiovisual. El matrimonio real fue el encargado de presidir el acto llevándose todos los halagos Charlene de Mónaco.
Una vez más, la princesa confió en la firma Louis Vuitton para brillar como nunca logrando un éxito rotundo. Charlene escogió un elegante vestido azul que caía con gracia desde los hombros hasta los tobillos, transmitiendo serenidad, elegancia y presencia en la alfombra roja.
La tela ligera y satinada jugaba sutilmente con la luz de los focos, generando reflejos suaves que resaltaban cada movimiento mientras caminaba. La elección del azul no fue casual: evocaba tanto el mar y las piscinas donde entrenó, como el glamour de Montecarlo y su festival televisivo. Así pues, todo el estilismo en su conjunto recordó a sus años de nadadora al mismo tiempo que rendía homenaje al motivo de la celebración.
Sin duda todo un acierto que confirma el buen gusto de Charlene de Mónaco por la moda y lo bien asesorada que está.
Charlene de Mónaco brilla en el Principado
Viendo las imágenes de Charlene es imposible no apreciar su escultural físico producto de su pasado como nadadora. La mujer de Alberto se mantiene en perfecta forma física y en su cita televisiva mostró el resultado de su esfuerzo.
Algo que combinó a la perfección con una puesta en escena donde su elegancia eclipsó a los medios allí presentes. El gran momento de la noche fue cuando los príncipes soberanos subieron al escenario para hacer entrega de uno de los galardones.

La afortunada fue la actriz, directora y productora estadounidense Robin Wright, conocida por su papel en La princesa prometida o Forrest Gump. De la mano de Charlene de Mónaco recibió la Ninfa de Cristal por su trabajo en el mundo del cine y la televisión.
En el momento de la entrega, Charlene brilló como nadie en el escenario coronándose como la gran estrella de la ceremonia. La princesa habló brevemente tras finalizar el evento, y todos los focos seguían posados en su aparición, celebrando tanto su atuendo como su discurso cercano.
La conjunción entre pasado y presente quedó reflejada en cada elemento elegido para la ocasión. Charlene recordó su vida anterior en las piscinas mientras asumía su rol actual con elegancia y compromiso representativo propio de la realeza moderna. Mimetizándose, también, con el motivo que le llevó a su cita televisiva.