La reina Sofía y Juan Carlos I posan juntas frente a un fondo oscuro.

Ricardo Pérez, chef de la Familia Real: 'En la mesa de Zarzuela se habla ese idioma'

El cocinero de la Corona desveló en una conversación privada cómo hablaban los Borbones cuando estaban comiendo

Hablar de la Familia Real implica adentrarse en un universo de estricta discreción, especialmente cuando se trata de la intimidad del Palacio de la Zarzuela. Muy pocas personas han tenido acceso a esa cotidianidad y una de ellas fue Ricardo Pérez, el primer chef de la Casa Real en la etapa del rey Juan Carlos.

Ricardo, que había servido como sargento, acabó conquistando al monarca y a toda su familia gracias a sus recetas de cocina tradicional. Años después de jubilarse, desveló en una reunión privada una curiosidad que todavía hoy sorprende: “En la mesa de la Zarzuela se habla ese idioma”.

Imagen de Felipe VI jurando la Constitución en las Cortes delante de Juan Carlos I y la reina Sofía
El primer chef de la familia destapó algún que otro detalle de la alimentación en la Zarzuela | Archivo

Ricardo Pérez, el chef de la Familia Real, destapa lo más desconocido

Ricardo Pérez fue el primer cocinero en la historia de la Zarzuela que marcó un antes y un después en los fogones reales. Con una base humilde y un dominio de los platos de cuchara, se ganó la confianza de don Juan Carlos y de la reina Sofía. Sus guisos tradicionales se convirtieron en el sello de la cocina de palacio, una gastronomía que combinaba sencillez con autenticidad.

A diferencia de sus sucesores, que han mantenido la discreción absoluta sobre la vida en palacio, él se permitió, tras su jubilación, compartir algún detalle. Según publicó El Mundo, en una conversación privada comentó: “En la mesa de la Zarzuela se habla ese idioma. El idioma común en la mesa cotidiana era el alemán”, dejando claro que se tenían muy en cuenta los orígenes germánicos de la soberana.

Sus palabras revelaron cómo el ambiente de las comidas familiares iba más allá de la etiqueta y los protocolos. En la mesa, se compartían costumbres personales y lingüísticas que reflejaban la diversidad cultural de la familia. Ese dato curioso mostró un lado desconocido del día a día de los monarcas y evidenció la influencia de la ahora reina emérita en la dinámica del hogar.

Juan Carlos I y la reina Sofía vestida de manera formal está en una ceremonia, con coronas sostenidas sobre sus cabezas.
En la Zarzuela, la familia hablaba alemán | RTVE

Los gustos culinarios de la Familia Real, según Ricardo Pérez

Además del detalle sobre el idioma hablado en la mesa, Ricardo Pérez llegó a comentar otras preferencias gastronómicas de los reyes eméritos. Según explicó, a doña Sofía le preparaba platos vegetarianos, ya que mantenía una dieta mucho más ligera y saludable. En contraste, don Juan Carlos era un apasionado de los platos de cuchara, aunque tampoco despreciaba la sencillez de un buen bocadillo.

El cocinero extremeño relató igualmente, durante un encuentro culinario celebrado en Champagne, que uno de los platos favoritos del ahora rey emérito era el pescado acompañado de puerros. Estas confidencias, aunque menores, permitieron entrever que la alimentación en Zarzuela no siempre estaba marcada por la sofisticación, sino por la cocina tradicional española.

Mujer mayor con cabello rubio y ropa roja sentada en una mesa con un vaso de agua y un micrófono frente a ella
La reina Sofía apostaba por platos vegetarianos y su marido por los de cuchara | Europa Press

Lo interesante de estas revelaciones es que desmontan la idea de que la Familia Real ha vivido siempre rodeada únicamente de banquetes opulentos. La cotidianidad de la Zarzuela, al menos durante el reinado de Juan Carlos, parecía girar más en torno a guisos familiares, recetas de cuchara y elaboraciones sencillas. La función de Pérez no era solo alimentar a los reyes, sino aportarles un toque hogareño y auténtico en su día a día.

El paso de Ricardo Pérez por la Zarzuela marcó el inicio de una larga tradición de cocineros reales. Sí, en la que posteriormente han ocupado el cargo profesionales, como Carlos Galdámez y Antonio Paredes.

Todos ellos, a diferencia de Ricardo, han mantenido un silencio absoluto sobre la vida en la cocina de palacio. La confidencialidad es una norma escrita para quienes forman parte del servicio real, lo que hace todavía más llamativas las confesiones del primer chef.