El panorama de la restauración en Estados Unidos no deja de cambiar, y mantenerse en pie es una tarea cada vez más complicada. Aunque algunas marcas siguen atrayendo a un público fiel, otras comienzan a enfrentarse a una realidad difícil de ignorar. Tomar la decisión de cerrar puertas nunca es fácil, pero a veces resulta inevitable.
Una popular cadena de comida rápida ha anunciado que cerrará varios de sus locales durante el próximo año. Se trata de Noodles & Company, especializada en platos de pasta de distintas partes del mundo. Pese a haber sido muy valorada por su oferta variada, las nuevas tendencias en alimentación y los altos costes operativos han hecho que la empresa reconsidere su estrategia.

Una época de cambios para Noodles & Company
Noodles & Company llegó a tener más de 450 locales repartidos por Estados Unidos. Durante años, su principal atractivo fue permitir a los comensales personalizar sus platos y escoger entre opciones diversas como espaguetis con albóndigas o Pad Thai. Sin embargo, esta variedad ha resultado ser un arma de doble filo.
Preparar tantos platos diferentes implica tener una amplia gama de ingredientes frescos y empleados capacitados para cocinarlos. Esto encarece enormemente la operación, especialmente en tiempos donde los márgenes de ganancia son cada vez más ajustados. Además, los gustos del público han evolucionado y hoy en día se buscan opciones más saludables, algo que no siempre encaja con un menú basado en la pasta.
A todo esto se suma la dificultad de adaptarse a dietas como la keto o paleo, o a los clientes que evitan el gluten y los productos procesados. Para una cadena centrada en los fideos, complacer a todos se ha vuelto una tarea casi imposible. Por eso, Noodles & Company ha decidido cerrar hasta 21 establecimientos en 2025, sumándose a los 9 que ya cerraron en 2024, según The Street.

Una decisión difícil en medio de señales positivas
Inicialmente, la compañía Noodles & Company tenía previsto cerrar entre 12 y 15 locales propios. No obstante, la nueva estimación contempla el cierre de entre 13 y 17 restaurantes de su propiedad, además de 4 franquicias que no están rindiendo del todo bien. Esta medida busca reducir gastos y reenfocar el modelo de negocio hacia lo que mejor funciona actualmente.
Pese a estos recortes, la empresa no pierde del todo el optimismo. En el último trimestre, las ventas comparables aumentaron un 4,4 %, impulsadas en parte por nuevas incorporaciones al menú como el Fettuccine con camarones cajún. Estas novedades parecen estar conectando con el nuevo perfil de consumidor.
El CEO de Noodles & Company, Drew Madsen, ha asegurado que los resultados son alentadores, especialmente si se considera el contexto económico actual. Aunque los cierres son un paso duro, la compañía espera que estos ajustes sirvan para encaminarse hacia una etapa más sólida y enfocada.